Adara Molinero se abrió en canal antes de volver a España y dejar atrás su estancia en Honduras. El programa decidió que los supervivientes se despidieran de la isla haciendo un viaje por su vida pasada. La madrileña se empleó a fondo y no pudo evitar las lágrimas al recordar su turbulenta relación con Rodri Fuertes.
Estos más de 100 días en Supervivientes han ayudado a Adara a entenderse mejor y apreciar un cambio en su modo de ver la vida. Parte de ese cambio es visible en cómo siente ahora que fue su relación con el exgran hermano y qué ocurrirá cuando acabe el reality.
Adara Molinero se rompe al recordar su última relación
Todo lo que vive Adara lo vive con intensidad desmedida, ya sea su participación en un reality o sus relaciones amorosas. Por eso, aceptó participar en Supervivientes consciente de lo que supone para los concursantes una experiencia semejante.
Molinero no ha sabido hasta qué punto ha cambiado hasta que se ha enfrentado a su pasado. Una foto suya antes de viajar a Honduras le ha servido para abrir los ojos y entender que no llevaba la vida que quería. "Estaba huyendo de una vida que no me gustaba", confesaba.
Fue entonces cuando la madrileña comenzó a emocionarse al recordar su relación de pareja con Rodri Fuertes. "No era feliz, he estado con una persona durante tres años", comenzaba explicando entre lágrimas. "Nos queríamos muchísimo, sentía auténtica adicción a él y eso no es bueno", reconoció.
Adara se ha dado cuenta de que lo suyo con el exgran hermano no era un amor bonito y que solo le ha provocado dolor. Por mucho que asegura que lo quiso, no fue suficiente para poder salvar los problemas que amenazaban la relación.
"Aquí me he dado cuenta de que no es bueno", añadía, reconociendo que esa obsesión por Rodri le hizo mucho daño. Estos meses en Supervivientes le han ayudado a tomar una decisión y tiene claro que ya no quiere sufrir más.
No es la primera vez que Molinero menciona a su expareja. Hace poco reconoció que ni se había acordado de él durante estos días en la isla, centrada como estaba en su concurso. Un primer paso que anticipaba el fin definitivo a su relación.
Adara Molinero pone punto y final
Adara no podía ni imaginarse que una simple foto suya podría desencadenar todo un tsunami en su interior. Acordarse de Rodri fue determinante para haber balance de cómo fue su relación y tener claro que fue perjudicial para ella.
"Es destructivo, es desesperante estar metida en una relación así", explicó. "Es hora de que cada uno tome su camino y que seamos felices", sentenció, poniendo punto y final a cualquier reconciliación.
En los tres años que duró el noviazgo, la pareja pasó por numerosas crisis y reconciliaciones. No obstante, parece que Molinero tiene asumido que no le dará más oportunidades y que es hora de hacer su vida en solitario.
"Siento aquí que puedo con mi vida y con mucho más", opinaba convencida de lo mucho que Supervivientes le ha cambiado. "Me ha venido increíble y todo el mundo debería vivir esta experiencia", reconocía.
Ante esta declaración de intenciones, Rodri ha optado por guardar silencio. No se ha pronunciado sobre las palabras de su ex y parece que va a seguir siendo fiel a su decisión. Una actitud que la madre de Adara le agradece y que aseguró que "dice mucho de él".
A pesar de lo turbulenta que parece que fue la relación, Adara y su ex siguen teniendo una bonita amistad. Para ella, Fuertes es "una persona increíble" que siempre recordará con cariño. "Aunque cueste entenderlo, lo que ha sido bonito y de corazón siempre puede terminar bien", publicó en una ocasión Rodri.