Alejandra de Rojas es la mujer más buscada del momento porque el periodista José María Olmo ha confirmado los rumores. Siempre se ha dicho que Juan Carlos I tenía una hija secreta y Olmo se ha atrevido a dar el nombre. Dijo que se llamaba Alejandra y que era un rostro conocido en la crónica social, así que no ha sido difícil encontrarla.
Alejandra de Rojas está sometida a mucha presión y no pensaba romper su silencio, pero no ha tenido más remedio que hacerlo. Se ha visto obligada a dar un paso más: ha desmentido ser hija de Juan Carlos y ha sido bastante contundente. Según lo que ha contado, no tiene ningún tipo de vinculación con el emérito y pide que cesen estas informaciones.
Alejandra fue una persona con bastante repercusión en la prensa del corazón, pero después de casarse desapareció. Gran parte del público se había olvidado de ella y ha regresado por un tema que no es de su agradado, por eso está molesta. Ha prometido que Juan Carlos I no es su padre y dice que está tranquila porque no tiene nada que ocultar.
“Ante la noticia publicada la última semana como adelanto de un libro que se intenta publicar en breve, y el sinfín de noticias publicadas en prensa radio, televisión y redes sociales sobre mi persona, me veo obligada a desmentir de forma tajante mi condición de hija secreta del rey Juan Carlos”.
Alejandra de Rojas manda un mensaje contundente
Alejandra ha dejado claro que lo que se está contando, según su versión, es completamente falso. No olvidemos que José María Olmo, autor de la exclusiva, dice que tiene la información confirmada al 100%. El público está dividido: por un lado los que creen al periodista y por otro los que confían en Rojas.
La supuesta hija secreta de Juan Carlos ha asegurado que está pendiente de todo, aunque no haya hablado antes. Niega “todos los comentarios vertidos sobre un supuesto trato especial recibido durante mi infancia o juventud”. Y advierte con tomar acciones legales contra todos aquellos que insinúen lo contrario.
Se reserva “el ejercicio de acciones legales contra los autores y propagadores de las mismas”. Está muy molesta y no quiere que nadie piensa que su padre es Juan Carlos I, entre otras cosas por respeto a su familia.
Los abogados de Alejandra han hecho hincapié en resaltar la figura de sus únicos padres. Su cliente “reitera su admiración y agradecimiento a sus padres, ya fallecidos, a los que dice que debe todo y cuyo honor está a salvo para todos los que les conocieron”.