Alessandro Lequio es otro de los protagonistas del día después de que Ana Obregón haya confirmado que acaba de traer al mundo a su primera nieta, hija de Aless.
El conde había preferido mantenerse al margen en todo momento y alejarse de la polémica. Aunque desde el entorno cercano al italiano, aseguran que no está nada contento por cómo ha llevado las cosas su ex.
"Ella tenía que cumplir tres legados que le había dejado su hijo. Tres. Y los ha llevado a cabo. Uno, el libro, dos, la fundación, y tres, formar una familia. En ese sentido, ha querido crear una familia y traer a esta niña al mundo", detallan.
Es más, incluso habría intentado quitarle la idea de la cabeza e impedir que siguiese adelante con el proceso de la gestación subrogada.
Sin embargo, la niña ya está aquí, y esa es una realidad que no puede evitar, aunque de momento no sabemos hasta que punto planea implicarse en el cuidado y crianza de su nieta.
De hecho, Lequio ha estado completamente desaparecido estos últimos días, quizás intentando escapar de la tormenta mediática.
Así y todo, numerosos medios aseguran que la relación entre Alessandro y Ana pasa por un mal momento y entre ellos hay demasiada tensión.
Eso, a pesar de que su hijo le pidió en todo momento que permanecieran unidos, algo que han intentado cumplir a lo largo de los últimos años.
Y aunque el conde conocía de primera mano cuál era el último deseo de su hijo, no estaría del todo de acuerdo, lo que ha dado lugar a una fuerte tensión que ha salpicado incluso a su mujer, María Palacios.
En medio del revuelo que se ha generado, han tomado la drástica decisión de marcharse muy lejos. Concretamente, a la costa gallega.
Alessandro Lequio aparece muy bien acompañado
Allí Lequio espera "cerrar heridas, no abrirlas de nuevo. Solo quiere que su hijo deje de ser actualidad", aseguran. Y, precisamente, decidía reaparecer hace apenas unas horas para compartir una imagen en la que está muy bien acompañado.
"Con mujer, amigos y amigotes en el gran Peixoto", ha escrito junto a la instantánea en la que aparece muy sonriente tras disfrutar de una buena comida.
Sin duda, uno de sus lugares favoritos cada vez que viaja al norte y que tiene unas vistas impresionantes a la Ría de Pontevedra.
Mientras que, por su parte, su mujer María también "está cabreadísima, muy disgustada". Ella ve "innecesaria esta sobreexposición mediática en un asunto tan delicado y familiar. Y está viendo sufrir muchísimo a Alessandro Lequio con todo esto".
Sobre todo, porque para él supone revivir el dolor por la muerte de Aless, algo que ha llevado en silencio desde que le perdiera.
"La gente que me conoce sabe la relación que tenía con mi hijo y pueden entender como me siento", comentaba hace apenas unos días en El programa de Ana Rosa al conocerse la noticia.
A Lequio se le veía en todo momento muy afectado e incluso sus compañeros tenían claro que lo estaba pasando realmente mal.
"Los que le conocemos y lo queremos sabemos que está sufriendo", señalaban. Ahora, lo que muchos esperan es que el conde termine de dar la cara en su programa, desde donde ya le han felicitado. "Alessandro, te damos la enhorabuena, ya eres abuelo", ha dicho Joaquín Prat.
Mientas que, por su parte, Ana Obregón sigue estando en el punto de mira y permanece en Miami junto a la pequeña Anita a la espera de poder volver a España.