Alma Bollo es la concursante del programa de superviviencia que más le está costando recuperarse de la aventura. La hija de Raquel Bollo confesó que padecía un problema de salud que se agravó tras su viaje a Honduras.
Tras ser expulsada por la audiencia, la sevillana se puso en manos de profesionales para poner fin a sus problemas estomacales. Al Síndrome del Intestino Irritable que padece desde hace años se le ha unido otra dolencia que ha hecho que su salud se vea resentida. Ahora ya tiene el diagnóstico final de los médicos y comunicaba que dentro de poco empezará el tratamiento.
Alma Bollo da la última hora sobre su estado de salud
Alma Bollo ya tiene los resultados que esperaba de las numerosas pruebas médicas que se realizó tras regresar de Supervivientes. La hija de Chiquetete estuvo 100 días en Honduras que provocaron un agravamiento de la dolencia que padecía hacía años.
Concretamente, el Síndrome del Intestino Irritable que le causó muchas molestias durante el concurso. La mala alimentación, el esfuerzo físico y no poder descansar correctamente fueron algunas de las cosas que terminaron complicándole la salud.
Una vez de vuelta en España tocaba retomar su vida y recuperar los buenos hábitos alimentarios. Pero sobre todo, realizarse una batería de pruebas médicas para determinar con exactitud hasta qué punto se había resentido su enfermedad.
Sus seguidores han permanecido atentos a la última hora de Alma que, finalmente, ya ha recibido los resultados. Se trata de un triple diagnóstico que confirmaba en sus redes y que, por suerte, tiene tratamiento.
"Ya tienen todos mis resultados, ya hay tratamiento y puedo empezarlo", comenzaba diciendo. "Los resultados son una gastritis erosiva antral, de nuevo tengo el helicobacter pylori y la intolerancia a la fructosa", confirmaba.
La sevillana comenzó a preocuparse cuando, tras recuperar sus hábitos, notó que algo seguía sin ir bien en su cuerpo. Fue entonces cuando decidió ponerse en manos de profesionales que ya le han dado el motivo de sus molestias.
Alma se siente aliviada tras saber qué le pasa y, sobre todo, que tiene tratamiento. Ahora, solo le queda comenzarlo para volver a sentirse bien.
Alma Bollo y el tratamiento que deberá seguir para mejorar su salud
La gastritis antral consiste en una erosión de la mucosa del aparato digestivo. Esto provoca molestias estomacales que solo se pueden evitar a base de la ingesta de protectores que bloqueen los ácidos. Normalmente, este tratamiento deberá tener una duración de 30 días para permitir que el daño ocasionado en su aparato digestivo se restablezca.
Además de esto, Alma también deberá tomar antibióticos para combatir la bacteria helicobacter pylori. Lo que más le va a costar tratar es la intolerancia a la fructosa que deberá combatir evitando ingerir este tipo de azúcares.
Para ello, la hija de Raquel Bollo explicaba que contará con ayuda de nutricionistas profesionales que le orientarán. "Voy a pasar con los nutricionistas para tratar las intolerancias y aprender a comer lo que me sienta bien", señalaba.
Alma es consciente de que tiene por delante un duro trabajo, pero está segura de que aprenderá a convivir con sus dolencias. "Lo de la fructosa es muy complicado porque es el azúcar que se encuentra en los alimentos y eso es superdifícil porque todas las comidas lo contienen".
Pese al triple diagnóstico, la sevillana afirmaba estar "muy contenta", porque por fin podrá hacer algo para mejorar su vida. Todo es cuestión de seguir una dieta estricta que le ayude a paliar las molestias que lleva padeciendo desde hace tiempo.
De esta manera espera poder olvidarse de los dolores y de la hinchazón que tanto dio de qué hablar tras su paso por Supervivientes.