Antonio Resines continúa con su proceso de recuperación. Después de un mes y medio ingresado en el hospital a causa de una complicación del coronavirus, trata de volver a la normalidad. En las últimas semanas se le ha podido ver en distintos programas de televisión.
Además de poner al día a los espectadores sobre su estado de salud, también pretende agradecer la labor de la sanidad pública. En más de una ocasión ha confesado que se llegó a temer por su vida. Sin embargo, su mujer Ana y su hijo trataron de ser muy discretos en este sentido, manteniendo en secreto su verdadera situación.
De momento, Resines se ayuda de unas muletas para desplazarse. Ha ganado unos cuantos kilos y se le ve mucho más optimista. En realidad, nunca perdió la sonrisa, ni incluso cuando salió del centro médico.
A su lado siempre tiene a su mujer Ana Pérez-Lorente, su fiel acompañante desde hace 30 años. Ella se mantiene en un segundo plano, tratando de evitar a la prensa. Quiere que todo el peso de la fama recaiga sobre el actor.
Pese a que mantienen una sólida relación, la pareja llegó a la conclusión hace tiempo que lo mejor era separarse para dormir. Utilizan habitaciones distintas para que resulte más fácil poder descansar por las noches.
Ella fue la encargada de desvelarlo hace unas semanas durante su participación en Planeta Calleja. En un ambiente relajado y distendido soltó que "yo no lo habría contado", pero finalmente se lanzó.
Explicó que "tengo un problema respiratorio, soy asmática y ronco. Él por su parte es muy sensible al ruido", apuntaba Ana, muy distante siempre con los medios. Era una de las pocas veces que se la veía intervenir en un espacio de televisión.
El desgarrador relato de Antonio Resines sobre su enfermedad
Antonio Resines se encargó de confirmar esas palabras. Fue un gesto de confianza muy aplaudido por el público. El actor, siempre muy hermético en todo lo que tiene que ver con su vida privada, quiso mencionar un par de momentos críticos que vivió en la relación.
Confesó que había vivido un par de crisis muy fuertes con Ana, pero todo aquello se superó sin problemas. Después de pasar por el hospital, se puede decir que la relación se ha visto reforzada. Así lo demuestra el hecho de que ella no se separara de su lado en ningún instante.
Para sorpresa de todos, ella profundizó en el tema de los baches sentimentales. Detalló que hubo "dos parones: uno de mis cabreos duró tres años y otro seis", apuntó. Sin embargo, no quisieron entrar en detalles sobre los motivos que les llevaron a distanciarse durante ese tiempo.
Antonio Resines, arruinado y una máquina del sexo
Antonio Resines acudió hace unos días al programa La Resistencia de Movistar. Como es habitual, David Broncano se interesó por el dinero que tienen en el banco sus invitados, así como por sus prácticas sexuales.
El intérprete señaló que estaba "arruinado". La recuperación del coronavirus le estaba generando muchos gastos, pero "ya no tenía nada antes del covid", aclaró. En una anterior visita dijo que contaba con 11 millones, "pero es mentira, si los tuviera no lo diría ni iría a programas de televisión".
En lo que se refiere a las relaciones íntimas, destacó que eran "brutales". La culpa la tenían los corticoides que tomaba y que le provocan "erecciones brutales, como el caballo. Soy pobre y una bestia sexual", añadió ante el asombro de los espectadores.
Antonio Resines, como suele ser habitual en él, quiso aprovechar su presencia en televisión para romper una lanza en favor de los sanitarios. "Las he pasado putas en el hospital y quiero hacer un pequeño canto hacia ellos. Que sigan contratando gente porque hacen falta más medios", recalcó.