Las audiencias de ayer han provocado un estado de alarma en Mediaset que sigue inmersa en una crisis sin precedentes. Tras la cancelación de Sálvame, las tardes están ofreciendo datos catastróficos que auguran el peor de los escenarios.
Si el ya desaparecido espacio vespertino no lograba reflotar la situación, Así es la vida acaba de un plumazo con cualquier esperanza de mejora. Telecinco atraviesa sus horas más bajas y pierde definitivamente la atención de los espectadores. La franja de la tarde se resiste y supone ya la peor pesadilla para el grupo audiovisual.
Las audiencias de ayer acaban con toda esperanza
Ayer las audiencias volvieron a dejar patente que el problema de Telecinco se agrava por momentos. Mediaset sigue sin encontrar la solución a la crisis por la que atraviesa y ninguno de los cambios efectuados para paliarla consiguen frenarla.
La franja de las tardes se le atraviesa al grupo audiovisual y el pronóstico es demoledor. El pasado lunes, los datos de audiencia no pudieron ser peores. Ni Mía es la venganza, ni Así es la vida consiguieron llegar a los dos dígitos.
El programa presentado por Sandra Barneda anota su peor dato desde su estreno, solo un 9,1% de share y poco más de 700.000 espectadores. Haciendo una comparativa con Sálvame, el formato de Cuarzo empeora 3.3 puntos respecto al de La Fábrica de la Tele.
Si ya de por sí, el mítico programa no lograba convencer a la audiencia, el conducido por Barneda fracasa estrepitosamente. Todo ello también como resultado de la poca acogida que tiene la serie de Lydia Bosch en la sobremesa. Mía es la venganza suma un 7,8% de share, muy por detrás de Amar es para siempre de Antena 3 y La Promesa de TVE.
Atresmedia está aprovechando al máximo la crisis de su principal competidor y saca pecho, una vez más, gracias a Y ahora Sonsoles. El programa lidera su franja con 12,4 % de cuota de pantalla, haciendo que Telecinco pierda 1.6 puntos en tan solo siete días. Una caída en picado difícil de remontar si tenemos en cuenta que parece no existir una solución para los problemas de Mediaset.
Ayer las audiencias demostraron que buscan otras maneras de entretenimiento
Las audiencias son clave para entender cuáles son las preferencias del público a la hora de buscar entretenimiento. En este sentido, durante años, Telecinco lideró sin problemas cada una de las cinco franjas horarias.
Pero con el tiempo, esto ha cambiado notablemente y la fórmula del éxito ha terminado siendo un fracaso. Quizás por la excesiva exposición de una forma de hacer televisión que ha provocado el hartazgo en los espectadores.
Prueba de ello es cómo cada día los resultados de las audiencias demuestran que lo que ofrece Mediaset ya no interesa. En su lugar, gana interés la oferta de otras cadenas como Antena 3 o TVE. El ente público se ha colado contra todo pronóstico en los primeros puestos del ranking gracias a La Promesa, que lucha mano a mano con Amar en para siempre.
Ya en prime time, Hermanos sigue demostrando que fue un acierto y anota 14,1% de cuota de pantalla y 1.305.000 espectadores. El Hormiguero lidera una vez más la noche y cierra una de sus mejores temporadas.
Con todos los datos recopilados de las audiencias de ayer, Telecinco obtiene una media de 9,8% de cuota de pantalla. Una cifra que se sitúa a más de cuatro puntos de distancia de Antena 3 que suma 14,3%. Unas cifras muy preocupantes que han hecho saltar todas las alarmas en el grupo audiovisual y que podría tener consecuencias muy pronto.