Carla Vigo, la sobrina de la reina Letizia, ha presumido por todo lo alto de su novio Álvaro. De hecho, recientemente ambos protagonizaban una controvertida entrevista en la revista Lecturas donde ofrecían detalles acerca de su historia de amor.
“Nos conocimos por una aplicación y a las dos semanas vivíamos juntos. Fue un flechazo”, explicaba Carla sobre la forma en la que conoció a su novio.
Además, la parejita parece tener muy claros sus planes de futuro. Así, manifestaban su intención de casarse, “pero no por la Iglesia”. “Me gustaría casarme enfrente de la Alhambra”, confesaba la sobrina de la reina Letizia.
Y también reconocía su deseo de “convertirse en madre joven”. No inminentemente, “aunque si surge no le importaría”.
Mientras que, por su parte, Álvaro aseguraba que fue él quien daba “el primer paso para hablar, me pareció muy buena chica. Me gustó su cara, me llamó la atención la mirada. No sabía quien era”.
“Me pidió el Instagram y me preguntó que por qué tenía tantos seguidores, y yo pensando: «A ver cómo le explico esto sin que flipe». Le dije que lo buscara en Internet”, añadía Carla.
La traición que Carla Vigo jamás podrá perdonarle a la Reina Letizia
La hija de Érika Ortiz tendría muchas ganas de presentarle su novio a la reina, aunque de momento no ha tenido oportunidad.
Pero, lamentablemente para Carla, parece que no todo es armonía y felicidad, ya que sus suegros empezarían a estar un poco cansados de su presencia.
Carla Vigo, acusada de vivir de 'okupa' en casa de sus suegros
Así lo habría desvelado una fuente cercana a la familia. Y es que la joven y su novio decidían irse a vivir juntos muy pronto.
Primero, en la habitación que la sobrina de la reina tenía alquilada en un piso de Madrid. Aunque poco después pasaban a mudarse a la casa de Álvaro, donde actualmente conviven con sus padres.
La pareja estaría intentando ahorrar, pero de momento no pueden permitirse alquilar un piso juntos. Una situación que empezaría a incomodar en cierta manera a los suegros de Carla, que la recibían con los brazos abiertos cuando se trataba de una situación temporal.
Sin embargo, y al haberse alargado en el tiempo, parece que están deseando que la parejita se independice.
“Esto no tiene nada que ver con que la sobrina de Letizia Ortiz les caiga mal”, aseguran. Todo lo contrario.
El problema estaría en que ni Álvaro ni su nuera aportan dinero al presupuesto familiar y ni siquiera ayudan en las tareas de la casa.
“No hace absolutamente nada en casa. Actúa como si viviera en un hotel, donde le lavan la ropa, le hacen la comida y le limpian la habitación”, apuntan sobre el comportamiento de Vigo.
“Va mucho a su bola y no tiene en cuenta las típicas cosas que hay que tener cuando se convive bajo un mismo techo y más si es en casa ajena. Cosas como los horarios o las formas de hacer determinadas cosas. Y esto incomoda porque no está en su casa”.
Lo que los padres de Álvaro no entienden es que la joven no se esfuerce en aportar algo, aunque sea buscando un trabajo.
“Ella no ingresa mucho y lo que consigue lo gasta en sus clases de Interpretación. Su economía es muy deficiente, pero lo cierto es que no trabaja en nada que no tenga que ver con lo suyo”.
Y más teniendo en cuenta que Carla parece haberle pillado el gusto a eso de conceder exclusivas por las que puede embolsarse hasta 6.000 euros.
Un dinero que le duraría más bien poco. Tanto es así, que la familia de Álvaro le habría comprado productos de higiene o incluso ropa porque su chico tampoco gana mucho.
“Ahora le ha dado por las entrevistas, que le generan dinero rápido y sin apenas complicaciones porque mientras no cuente nada de la Familia Real apenas tiene consecuencias. Como mucho una regañina de su abuela o una llamada de su tía”, acusan a la joven.