Cuando aún no hemos podido ver ninguno de los nuevos formatos que pretenden cambiar la imagen que tiene el público de Mediaset. Su máximo responsable, Borja Prado, se ha visto con la necesidad de deshacer una de las primeras decisiones que tomó a su llegada a la cadena de televisión.
Pasan los días y los portales de televisión y la audiencia no dejan de hablar del nuevo Código Ético que ha interpuesto la nueva directiva de la cadena. Y que frena por completo algunas de las cosas que hasta ahora han definido sus programas y a los profesionales que trabajan en ellos.
Días atrás se decidió que quedaba totalmente prohibido hacer referencia a marcas, hablar de política y, ni mucho menos, generar mala relación entre las distintas productoras del grupo.
Otra de las medidas que quedó totalmente implantada fue la de no abandonar los platós de la cadena, por muy enfadado o molesto que estuviese el personaje que estuviese en pantalla. Esta medida, seguramente se pensó después del abandono de Paz Padilla del plató de Sálvame y que luego ha acarreado una polémica tremenda.
Pues Mediaset intentó despedirla por haber abandonado su puesto de trabajo, sin embargo, la justicia los obligó a readmitirla. Ahora para que no haya duda se prohíbe tajantemente este tipo de abandonos, evitando así que se repitan situaciones parecidas. Pero atención porque ahora ha habido un giro de guion y que lo cambia todo.
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Según han avanzado varios medios de comunicación, los directivos de La Fábrica de la Tele, la productora de Sálvame, han subido a los despachos de Mediaset para pedir algo muy importante. Esta solicitud pasaría por pedir que se eliminase la prohibición de abandonar el plató durante el directo.
De este modo, los colaboradores de Sálvame podrían volver a abandonar el programa cada vez que lo considerasen oportuno. Al parecer, la cadena habría accedido a esta petición y en breve el equipo de Sálvame quedaría totalmente exentos de esta norma. Este cambio lo considero muy importante, puesto que de ser así, los colaboradores recuperarían la normalidad que se les ha arrebatado.
Sálvame vive de la espontaneidad, de la pasión y de la improvisación de todos los colaboradores. Por ello, las nuevas normas de la cadena cortaban las alas a Belén Esteban, Kiko Matamoros y a todos los demás. Pero cuidado, porque de hacerse efectiva esta excepción, podría haber una letra pequeña y que no podemos obviar.
No todo Sálvame podrá irse cuando les dé la gana
Aunque aún no sabemos cuando será efectivo este cambio, es importante tener en cuenta que la dirección de Mediaset no tiene pensado pasar por el aro al cien por cien. Pues las líneas rojas pasarían también por sacar de esta excepción a los presentadores de Sálvame.
De este modo, si Jorge Javier Vázquez o Terelu Campos se van a medio programa, eso se entenderá como un abandono injustificado. Un abandono que ahora sí que podría suponer un despido del presentador en cuestión. Pues en la actualidad sí que constan unas normas muy claras y que, de no cumplirse, pueden suponer un seguido de represalias hacia quien se las salte.
El miedo y la prudencia impregna en los pasillos de Telecinco y cada vez son más los colaboradores que hablan poco por miedo a ser señalados por la vara del poder.
Me da miedo pensar qué será lo próximo, pues si con esto llevamos un mes hablando de lo mismo. Los próximos pasos de Mediaset me hacen pensar que irán mucho más allá. Y no sería raro que pronto tengamos que lamentar el fin de alguno de los programas clásicos de la cadena.
Unos modelos que durante años han funcionado a la perfección y, además, han contado con los aplausos de la audiencia. Pero ahora todo esto se podría acabar para permitir a los nuevos jefes de la cadena desplegar sus nuevas ideas y formas. Eso sí, espero que jamás acabe Sálvame, pues no imagino un mundo sin ser partícipe de la vida de los colaboradores del programa.