Ana María Aldón se ha convertido en una mujer nueva tras su divorcio, aunque hace tiempo que había conseguido hacerse un nombre más allá de Ortega Cano.
La diseñadora no puede estar más feliz por haber podido rehacer su vida e incluso estrenar nueva casa en apenas unos meses.
La situación que vivía en casa de los Ortega-Mohedano se había vuelto insostenible, motivo por el que también terminaba explotando en televisión.
Desde entonces, los reproches ha sido constantes entre Aldón y su ya exmarido. Ana María jamás se sintió valorada y lamentaba que Ortega Cano no le diese su sitio.
Además, el comportamiento de la hija del diestro, Gloria Camila, tampoco era el mejor, ya que no terminaba de tragar a la que fuese su madrastra.
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A los 45 años, Ana María Aldón ya parece haber encontrado su propio camino. Ahora, la colaboradora ya es toda una estrella en Telecinco, donde suele aparecer en varios de los programas de la cadena.
Empezando por los fines de semana en Fiesta junto a Emma García, como en otros formatos al estilo del Mediafest. Aunque también pudimos verla dándolo todo en Supervivientes, por lo que queda claro que nada se le resiste.
Actualmente, la gaditana da la cara por su hija Gema, que está dispuesta a seguir sus pasos en Honduras.
“Me emociona ver a mi hija de dónde saca la fuerza con lo chiquitita y lo poquita cosa que es, es muy grande y muy fuerte. Me encantaría decírselo”, aseguraba con lágrimas en los ojos.
Ana María Aldón se convertía en madre muy joven, nada menos que con 17 años. Algo que le cambiaba la vida por completo y la hacía sentirse muy sola.
“Yo me quedé con 17 años con una niña en sus brazos mientras mis amigas hacían cosas típicas de su edad”, explicaba.
“Tuve que salir adelante y lo hice lo mejor que pude y supe. Ella ahora que es madre sabrá que yo hice lo mismo que ella”, compartía muy afectada. “Ella no quiso hacer lo mismo que hice yo, quizás porque no quería que su hija se criara sin padre”.
Aldón dejaba claro que había ayudado a Gema “todo lo que he podido y más”. “En estos 27 años que tiene mi hija he sufrido mucho y siempre he estado ahí a su lado”.
“Y cuando no he podido estar físicamente, he estado por teléfono siempre que me ha necesitado”, manifestaba al respecto.
“No me arrepiento porque tengo dos hijos, pero me hubiese gustado haber tenido dos cuerpos para estar al lado de cada uno”.
Pero, pese a todos los esfuerzos que ha hecho, todavía no sabe si su hija ha llegado a perdonarle, “aunque quizás soy yo quien no me lo ha perdonado a mí misma”. “Lo siento mucho si no he estado a la altura como madre”, se lamentaba.
Lo cierto es que el parto de la niña resultó bastante traumático para Aldón, ya que con 17 años se vio sola en el hospital.
Además, parece que Gema nació con un soplo en el corazón y estuvo a punto de fallecer por esta anomalía cardiaca.
“Estuve toda la noche despierta esperando a la niña, pero no venía y no me la traían. Dice la doctora que no sabe si la niña va a sobrevivir”, contaba en una ocasión.
“Ese fue otro trauma muy gordo. Porque yo esperé toda la noche que viniese alguien a verme. Mi madre, mis hermanas, esperaba que alguien entrase por la puerta. Tenía 17 años”, alegaba.
Desde su paso por Supervivientes, ha llamado mucho la atención cuál es el peso y la altura de la diseñadora.
Una pregunta a la que ella misma decidía dar respuesta en redes sociales. Así, Ana María Aldón desvelaba que pesa “exactamente” 58 kilos y usa una talla 38. Además, también dejaba claro cuál es su altura: 1,70.
Durante el reality, la diseñadora llegaba a perder hasta 10 kilos y decidía cambiar de look de forma radical, llegando a raparse la cabeza a cambio de una recompensa.