Belén Esteban ya está preparada para una de las fechas más señaladas y especiales del año. La Navidad está a la vuelta de la esquina y la de Paracuellos tiene muy claro a quién sentará a su mesa.
Entre sus invitados más especiales podría encontrarse Daniel Wozza, novio de Andrea Janeiro.
"Cocinaré yo, siempre me toca a mí. Soy de sopa de marisco, ensaladilla, que la hago muy rica, el cabrito, entremeses… lo típico", confesaba en una reciente entrevista.
"Mi madre tomará pescado. Yo ahora que he engordado mucho me voy a poner… Ya en enero adelgazaré", bromeaba.
Esteban ha tenido un año bastante complicado, y es que la aparatosa caída que sufría hace unos meses la llevaba a pasar por una dolorosa recuperación.
De hecho, su familia sigue preocupada por la evolución de su pierna tras la ruptura de tibia y peroné.
"Este año no ha sido bueno por lo que me ha pasado. No me puedo quejar porque siempre hay algo peor", señalaba al respecto la ex de Jesulín.
"No quise asumir al principio lo que me había pasado, pero ya voy a ir a rehabilitación. Me veo que va muy lento. Me han dicho que hasta abril no voy a estar bien".
"Me está costando que el hueso llegue a su sitio. La cabeza me ha costado más que lo físico. He estado mucho tiempo triste y eso me ha generado muchos miedos. Luego lo acepté", desvelaba emocionada.
Algo más recuperada, Belén ya ha retomado poco a poco su vida normal, empezando por el trabajo. La colaboradora sigue ocupando su puesto en Sálvame, aunque también está algo preocupada por el futuro que le espera en el programa.
"Si algún día tiene que acabar Sálvame, yo acabaré con Sálvame, lo tengo clarísimo", sentenciaba.
Daniel Wozza, novio de Andrea Janeiro, recibe un mensaje muy especial
La de Paracuellos se siente muy orgullosa de su trabajo, pero también quiere otras cosas en su vida. "Estoy muy agradecida a la televisión, pero quiero hacer otras cosas", admitía.
Lejos de Telecinco, Belén Esteban ya ha dado los primeros pasos para sacar al mercado una exitosa línea de productos de alimentación, entre los que podemos encontrar desde patatas fritas a gazpacho.
Es más, la tertuliana ya está trabajando en nuevas ideas que la ayudarán a reinventarse. "Voy a sacar patatas de jamón y campesinas, y en diciembre voy a sacar otra cosita. Estamos muy contentos, está funcionando muy bien, trabajando mucho".
Lo que también entra en los planes de Belén para este año que viene es volver a pasar por el altar con su marido, Miguel Marcos.
La pareja tiene la ilusión de poder casarse por la Iglesia, algo que se han visto obligados a posponer durante un tiempo.
"Él se quiere casar por la Iglesia, pero a mí me da pereza, pero yo creo que él se lo merece. Ahora no estoy yo para organizar nada", decía sobre el gran sueño de su marido.
Lo que queda claro es que Belén está preparada para todo. "Para seguir trabajando. Y también entendería que, si llega una persona a la que no le gusta mi manera de trabajar, no quiera trabajar conmigo".
"Los equipos cambian y no se quién va a venir. Pero entenderé que haga conmigo lo que estime oportuno. La tele no me pertenece. Yo pertenezco a la tele, pero no es mía. Yo soy un trabajador más", añade con orgullo.