Fernando Sánchez Dragó ha muerto a causa de un infarto a los 86 años y la triste noticia ya ha dado la vuelta al mundo. El escritor pasó a la historia hace mucho tiempo porque detrás de él hay una carrera formidable que ha recibido muy buenas críticas. Es autor de más de 40 libros, sin contar los ensayos en los que ha participado: toda una vida dedicada a las letras.
Fernando Sánchez Dragó enseguida destacó entre sus compañeros y se hizo un hueco en el mercado literario. Siempre ha tenido una reputación excelente, pero no pudo evitar ser objeto de la prensa del corazón durante una etapa. Ha estado casado en tres ocasiones y ninguna de ellas fue definitiva, pero sí encontró un gran amor en sus últimos años.
Fernando se enamoró de la periodista Emma Nogueiro y enseguida le criticaron por haberse fijado en una chica demasiado joven. En este sentido sí recibió ataques, pero en el resto de facetas siempre ha tenido un perfil bajo y discreto. Emma tenía 28 años cuando se conocieron, ella trabajaba en un medio digital, le hizo una entrevista y enseguida se enamoró de él.
Fernando habló en alguna ocasión de la diferencia de edad que les separaba: exactamente 57 años, pero para él no era un problema. Desveló que tenía un espíritu joven y que entre ellos había una confianza máxima, por eso empezaron los rumores. Hubo medios que aseguraron que el artista iba a casarse por cuarta vez y él no tuvo más remedio que pasar a la acción.
Sánchez Dragó desmintió el rumor que circulaba sobre su novia meses antes de morir, durante una de sus últimas entrevistas. Habló con la prensa para desmentir que Emma quisiera casarse con él, esas no eran las intenciones de la periodista. Incluso le llegaron a acusar de estar motivada por otros intereses, pero el escritor los desmintió de forma tajante.
Fernando Sánchez Dragó y su buena relación con su ex
Fernando nunca ha ocultado nada, de hecho convivía con su última mujer mientras estaba saliendo con Emma Nogueiro. Naoko, la última esposa del escritor, todavía no se ha pronunciado, pero es evidente que lamenta mucho su pérdida. Nunca han tenido problemas y siempre han estado muy unidos, por eso no trascendieron las causas del divorcio.
Sánchez Dragó quiso dejar claro que su novia no quería pasar por el altar y que no buscaba nada en particular. Habló de este tema con varios periodistas porque quería protegerla y distanciarla de los rumores que estaban en circulación. La relación que tuvo el artista con la prensa siempre fue buena, pero mantuvo las distancias y fue prudente.
El escritor se enamoró de Emma durante una entrevista y en Semana explicó que estaba más enamorado que nunca. No pensaba en boda, pero tampoco lo veía necesario porque lo que sentía iba mucho más allá.
“Ella vino a mi casa a hacerme una entrevista para un periódico. Yo ya estoy aburrido de que me pregunten siempre lo mismo, los periodistas son muy aburridos a veces. Pero llegó ella y vi que, además de lista e inteligente, estaba muy buena”, comentó sin pudor.