Ana Rosa Quintana tenía muchas ganas de volver, así lo hizo saber ayer tras su primera aparición en plató después de casi un año sin pasar por allí.
Ayer por la mañana hubo muchos abrazos, besos, sonrisas y hasta alguna que otra lágrima de emoción debido al regreso de la presentadora a su programa.
Durante todo este tiempo, el relevo del programa lo han llevado Joaquín Prat y Patricia Pardo que han trabajado muy duro para poder continuar con el legado de Ana Rosa Quintana.
Ana Rosa Quintana, de nuevo, al mando
Ana Rosa hizo ayer sus confesiones más duras en el programa. Aunque ella se encuentra bien, quiso explicar cómo había vivido el proceso del cáncer, cómo este le trastocó la vida y cuánto le falta para que le den el alta médica.
"En 17 años que tienen mis hijos, nunca les había visto ir al colegio", confesó la presentadora a la revista ¡Hola!. Tiempo que le ha venido también bien para poder disfrutar de su familia.
El programa de Ana Rosa arrancó ayer con normalidad dentro de la bienvenida que le tenían preparada a la presentadora. Comenzó con la entrevista al presidente del Partido Popular, Alberto Núñez-Feijóo, en la mesa de política, y finalizó con José Ortega Cano, en el panorama de El club social.
Ana Rosa había confesado que estaba bastante nerviosa la noche anterior, nervios que se acentuaron tras la polémica declaración del torero. "Ana María, mi semen es de fuerza, ¡vamos a por la niña!". La presentadora confesó que se había quedado sin palabras, "se me secaba la boca".
Los apoyos incondicionales de Ana Rosa Quintana
Como no podía ser de otra forma, Ana Rosa se ha sentido muy arropada por familia y amigos que le han querido dar la bienvenida de nuevo en su primer día.
Al encuentro fue Jorge Javier, Paolo Vasile, Chelo Montesinos, entre muchos otros. También estuvo su marido, Juan Muñoz, y dos de sus hijos.
"Hoy me han dado más besos que en toda mi vida. Me siento como una novata en su primer día", señaló Ana Rosa emocionada por la cálida bienvenida que le habían brindado cada una de las personas allí presentes.
"Mis hijos se han portado genial todo el tiempo y mi marido me acompañó cada minuto y me hizo la vida divertida". Con estas palabras, la periodista mostraba su agradecimiento por la familia que tenía y la cual le había ayudado tanto en estos momentos tan duros.
También contó la cara B que tiene el cáncer. "Es una enfermedad que la padece toda la familia, no solamente los que la estamos viviendo. Sufren exactamente igual, yo he tenido mucha suerte, una familia muy unida".
Pese a lo que vivió, siempre se ha mostrado optimista. Desde el día en el que dio el mensaje en el programa de que se iba por una temporada sabía que aún no se iba a jubilar pese a este bache.
"Nunca me he planteado que no iba a salir bien, tenía confianza plena en mis médicos, que me dijeron que estaban ahí para curarme. No soy de las personas que peor lo ha pasado, los tratamientos han sido benignos conmigo", situación que Ana Rosa agradece en el alma.
Pese a que la presentadora se le hizo muy largo el periodo de parón, pudo disfrutar de su familia y amigos en justa medida. Ahora regresa con las pilas cargadas y llena de ilusión para afrontar esta nueva temporada al lado de dos de sus compañeros estrella: Joaquín Prat y Patricia Pardo.
Y aunque durante cinco años, la periodista tenga que seguir con medicaciones y revisiones, todo apunta a que continuará al frente del programa más longevo de la televisión.