La idílica vida que parecían vivir Gerard Piqué y Shakira se rompió de la noche a la mañana para sorpresa de todos. Saltaba la bomba de su separación y, desde entonces, ambos viven un auténtico calvario.
Shakira ha intentado refugiarse en su familia y en el trabajo. Lanzando nuevos éxitos y centrada en el cuidado de su padre, la cantante colombiana espera con ansia cerrar esta etapa de su vida, y abrir una nueva en Miami junto a sus hijos.
Por su parte, Piqué ha anunciado su retirada del fútbol, y sigue viviendo el amor al lado de su nueva chica, Clara, con la que cada vez le vemos más a gusto.
Sin embargo, Gerard y Shakira siempre estarán unidos por sus hijos, Milan y Sasha. Ellos son lo más importante para ambos, y por eso han querido cerrar el acuerdo de separación cuanto antes, aunque a sus hijos no les ha hecho ninguna gracia.
Tras más de doce horas de reunión, Piqué y la cantante han llegado a un acuerdo. Los pequeños se irán a vivir a Miami con Shakira, pero Sasha y Milan le han dicho a su madre que prefieren quedarse a vivir en Barcelona, donde tienen su círculo de amigos.
Shakira y Gerard Piqué por fin llegan a un acuerdo de divorcio
Sin embargo, parece que la decisión está tomada, y que los niños de siete y nueve años se trasladarán a Miami en un par de meses. De hecho, la cantante ya ha escogido el centro escolar al que llevará a sus pequeños cuando aterricen en Estados Unidos.
Este hecho deja en una delicada situación a Piqué, que vive su nuevo amor de la mano de Clara en Barcelona. Pero parece que el acuerdo al que ha llegado con Shakira deja claro los términos.
Parece que Piqué se desplazará a Miami diez días al mes para estar con sus hijos y no perder el contacto. Sin embargo, para que pueda hacerlo deberá cumplir una condición: no puede llevar a su novia.
Al parecer, el acuerdo al que han llegado es muy claro sobre este tema, y Shakira no está dispuesta a que la mujer que ha roto su matrimonio pasee con sus hijos por Miami diez días al mes.
La situación entre Piqué y Shakira es cordial por el bien de sus hijos, pero la distancia que pondrá de por medio la colombiana puede traer algún que otro conflicto. De momento, sus hijos ya le han dicho a sus padres que no quieren irse a Miami.