Iñaki Urdangarin sigue estando en el punto de mira, y más ahora que podrían haberle pillado en una gran mentira.
A pesar de su ruptura con la infanta Cristina y ya no formar parte de la familia real, el exduque de Palma seguía contando con su propia escolta.
Una protección a la que tenía acceso gracias al Gobierno y ante lo que muchos pusieron el grito en el cielo.
Justo por eso, el propio Ministerio del Interior daba orden al equipo de agentes que tiene destinado a Casa Real de que se iniciaran los trámites de retirada de la escolta.
Sin embargo, se encontraban con varios baches en el camino. Para empezar, que ningún responsable del grupo se atrevía a firmar los documentos de retirada de los escoltas.
Y, por otro lado, que los propios escoltas se negaban a renunciar. Además, el propio Urdangarin insistía en seguir manteniendo a la seguridad, ya que son los encargados de protegerle del acoso de la prensa.
En su caso, ha contado como mínimo con cuatro agentes a su servicio y hay veces que incluso se habla de ocho personas.
Por tanto, tendría miedo a lo que puede pasar en el caso de quedarse tanto él como su novia, Ainhoa Armentia, sin esa protección.
En su caso, el principal objetivo es evitar que los paparazzis capten momentos íntimos con su nueva pareja.
Además, el ex de la infanta Cristina siempre ha mantenido una relación excelente con su equipo, con los que pasa mucho tiempo e incluso puede presumir de haberse convertido en grandes amigos.
En su momento, los escoltas llegaban incluso a subirles comida a Iñaki y a su novia al despacho de abogados donde trabajaban para que nadie pueda fotografiarles y preservar su intimidad.
Iñaki Urdangarin sigue contando con sus escoltas
Mientras que en Ginebra, los de la infanta Cristina han llegado a desplazarse a por pizzas para que ella pudiera seguir centrándose en su trabajo.
Pero pese a los rumores y especulaciones al respecto, desde el programa Fiesta han podido comprobar en exclusiva que el exduque de Palma sigue contado con sus escoltas.
Algo ante lo que Urdangarin se ha negado a pronunciarse. "No tengo nada que decir, muchísimas gracias".
En las imágenes emitidas por el programa de Emma García puede verse como los agentes le piden la documentación a los reporteros que pretenden entrevistar a su protegido.
Por tanto, queda claro que de momento el exyerno del rey sigue contando con este exclusivo servicio de la Casa Real valorado en nada menos que 8.000 euros y pagado con dinero público.
Pese a ello, es muy probable que Urdangarin pierda su escolta hacia el mes de junio, justo cuando su hija menor de edad, Irene, cumpla los 18 años y también pueda firmar su divorcio.
Urdangarin espera con muchas ganas ese momento, y ya habría dejado muy claras sus condiciones de cara a la separación.
Así, habría exigido a su ex una pensión mensual de miles de euros, una indemnización de dos millones de euros y también varias propiedades a su nombre.
Y todo con el objetivo de garantizar su silencio, tal y como señalan diversas fuentes. Así, habría sido el propio rey Juan Carlos quien habría intercedido para proteger a su hija y le habría recomendado ceder a todas sus exigencias.
Así, se aseguran la tranquilidad de no tener que enfrentarse a más escándalos que salpiquen a la monarquía.
Por su parte, parece que la infanta Cristina también ha comenzado a rehacer su vida e incluso estaría ilusionada con un nuevo amor.
"La infanta parece que tiene ya un nuevo amor. Parece que está contenta, está feliz", informaban en Fiesta.
Sin embargo, de momento "le han pedido que no se deje ver porque está en los tramites del divorcio".