Isabel Preysler anunció el pasado 28 de diciembre su ruptura con el escritor Mario Vargas Llosa. Desde entonces, muchos han sido los comentarios acerca de los motivos más allá de lo explicado en la revista ¡Hola!. Lo que pocos esperaban es que el otro protagonista de la historia aportara su versión ante los micrófonos de los reporteros.
La noticia provocó tal agitación mediática que Isabel y Mario se alejaron del foco y de España; ella a Estados Unidos, él a Francia. Casi una semana después de la publicación de la portada, el Nobel rompía el silencio y la discreción a la que nos tiene acostumbrados. Vargas Llosa regresaba de París, donde había recibido el nuevo año con su hijo Álvaro.
El escritor ha querido confirmar que la ruptura con Isabel Preysler es real, por un lado. Pero que los motivos son diferentes a los explicados en la revista, por otro. “Esos motivos no son ciertos”, puntualizó Mario a su vuelta de la capital francesa.
Isabel Preysler no aporta la única versión
Los medios de comunicación aguardaban su llegada a la puerta de su domicilio en el centro de Madrid. Allí fue donde la expareja de Isabel Preysler ha realizado estas declaraciones: “Yo me encuentro muy bien”, explicaba mientras salía de un taxi con abrigo y gorro oscuros. El escritor, que no quiso dar más detalles a la prensa, desmintió que los celos fueran la causa: “Los motivos de la ruptura no existen”.
Una versión no del todo coincidente con la aportada en la revista ¡Hola!: “Mario y yo hemos decidido poner fin a nuestra relación definitivamente”. Ese era el mensaje con el que Isabel Preysler anunciaba su ruptura. A mediados de diciembre, según dicha publicación, tras una escena de celos, el Nobel habría abandonado la vivienda en la que convivían.
Se sabe que esta no ha sido la única crisis vivida por la pareja. A principios del pasado verano, Vargas Llosa regresó a su piso en el centro de la capital. En ese momento Isabel y Mario se vieron obligados a desmentir los rumores de ruptura, que ahora se han confirmado.
Isabel Preysler ya desmintió un distanciamiento en verano
Preysler entonces aseguró a 'su' revista: “No hay ningún tipo de distanciamiento, ni siquiera físico”. Mario, por su parte, salió en defensa de su relación con Isabel y declaró que estaban “bien”. El escritor peruano justificaba haberse instalado en el piso de la familia por ser punto de encuentro para las visitas de sus hijos a España.
Días después la pareja viajó a Ibiza para reunirse con los amigos y familiares de Gisela Rich tras su fallecimiento. La multimillonaria fue anfitriona de Isabel Preysler y Miguel Boyer durante varios veranos, y más tarde también del escritor. Este viaje confirmó que no había ruptura y él regresó a la vivienda de Puerta de Hierro.
Las palabras del escritor a la prensa habrían decepcionado a Isabel Preysler, ella no esperaba que su expareja fuera a pronunciarse ante los medios. Esta actitud hace que aumenten los rumores, en lugar de detener todo tipo de especulaciones. Isabel niega que el motivo sea la negativa de Vargas Llosa a contraer matrimonio.
Según apuntan algunos medios, Isabel Preysler tiene sospechas de que son los hijos del Nobel los que están detrás de ciertos “bulos”. Por su parte, Mario, según el diario El Mundo, se encuentra “feliz” e “ilusionado”, preparando su nuevo libro y su discurso en la Academia Francesa.
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