Jesulín de Ubrique no es muy dado a hablar sobre su vida privada, y mucho menos sobre sus hijos, a los que ha prometido proteger del acoso mediático. Sin embargo, hace unos años salió a relucir un encuentro que el torero tuvo con sus dos hijas, Julia y Andrea Janeiro.
¿Qué ocurrió aquel día? Era la propia Belén Esteban la encargada de anunciar por todo lo alto que Jesulín por fin había visto a su primogénita, con la que apenas mantiene relación. "Si me quedase callada, me sentiría mal. El padre ha visto a sus hijas", aseguraba sobre aquel acercamiento que se produjo en 2021.
Lo más llamativo, es que en anteriores ocasiones Jesulín ya había viajado a Madrid por trabajo, pero no había tenido tiempo para reunirse con ellas.
Al parecer, fue el propio torero quien se ponía en contacto con Julia y Andrea para reunirlas después de tanto tiempo sin verse. Y es que a pesar de vivir en la misma ciudad, parece que las hermanas no coincidían demasiado.
Fuentes cercanas aseguran que a pesar de que la relación entre Jesulín y su hija mayor no era demasiado fluida, sí que se había encargado de mandarle mensajes mientras estudiaba en el extranjero. Justo por eso, la expectación ante ese cara a cara era máxima.
Jesulín de Ubrique se reunió con sus dos hijas
Y, según testigos, todo fue a las mil maravillas. "Durante la entrevista de su padre, estuvieron los tres juntos y se hacían guiños mutuamente. Se reían", destacaron sobre la gran complicidad y buen rollo que desprendían.
Algo, que implica un gran paso entre ellos, ya que se hace evidente que Jesulín no ha tenido la misma relación con Andrea Janeiro que con sus otros dos hijos.
De hecho, no es la primera vez que Belén Esteban le ha echado en cara a su ex lo mal que se ha portado con ella. "Si a una hija le das un piso, también tienes otra. Pues le das otro", explotaba ante el claro trato de favor que ha visto por parte de Jesulín hacia Julia Janeiro.
"Estoy rota por lo que ha sufrido mi hija, porque veo cosas que para unos sí hay, y para otros no hay, me parece muy injusto. Tú tendrás cuatro, pero yo tengo una y esa es la que me duele", sentenciaba implacable.