Joaquín Prat ha entrevistado a Pelayo Díaz en Ya es mediodía y ha abordado la polémica del momento desde un punto de vista llamativo. Pelayo está recibiendo ataques porque la directora de una empresa de ropa se ha burlado de su estilo y él le ha devuelto el golpe. Piensa que esta persona debería ser despedida e incluso ha publicado su perfil de una conocida red social.
Joaquín Prat ha aprovechado el momento para hablar de sus detractores y les ha enviado un mensaje que está causando sensación. “Me cagaría en los muertos de más de uno, de hecho me cago y luego los bloqueo”, ha explicado en su programa. Después ha reconocido que las críticas le afectan, aunque muchas de ellas no termina de entenderlas.
Joaquín está convencido de que gran parte de sus enemigos tiene demasiado tiempo libre, por eso se molestan en atacarle. Sin embargo, reconoce que todo tiene un límite y que en ocasiones se siente mal cuando lee algún comentario negativo. “Sí me afecta, depende del momento, pero sí, aunque habría que ver las vidas de ellos”, comenta.
Joaquín ha charlado con Pelayo, quien le ha dado la razón y ha defendido su derecho a réplica. Piensa que no es justo recibir ataques por ser un personaje público y asegura que él también tiene la capacidad de defenderse. “Hay gente que tiene mucho tiempo libre y parece que no se puede contestar a las personas que nos atacan”, declara el influencer.
Joaquín Prat ha perdido la paciencia
Joaquín está cansado de guardar las formas y ha perdido la paciencia, por eso ha cargado contra todos aquellos que son injustos con él. “Llevo 15 años haciendo televisión, así que imagínate lo inseguro que soy”, ha comentado previamente. Después ha reconocido que algunos comentarios le hacen daño, por eso bloquea a los usuarios más agresivos.
Prat se ha ganado el aplauso de sus compañeros, especialmente de Alexia Rivas, quien ha admitido que a ella le pasaba lo mismo. En primera instancia no tiene en cuenta a sus enemigos, pero siempre hay gente que hace más daño de la cuenta. Alexia ha reconocido que ella también recibe muchos mensajes negativos por el simple hecho de ser un rostro popular.
El presentador, después de estudiar el caso de Pelayo, le ha terminado dando la razón. Defiende que todas las críticas deben entrar dentro de unos márgenes. No sirve faltar el respeto y luego no admitir ninguna respuesta.
“Esto no es un tema de que a alguien no le guste mi look, el problema es cuando una persona me etiqueta y quiere una reacción. Yo entro en su perfil y pone que es una responsable de moda, por eso no entiendo que esparza odio de esa manera. Ella ha generado un diálogo de odio, pero no me ofendí porque no le gustara mi look”, ha insistido el influencer.