Kiko Hernández ha dejado muy preocupada a su familia tras destaparse su último mensaje. El contenido del mismo ha sorprendido a todo el mundo, incluso a los compañeros de Sálvame. No obstante, vuelve a dejar claro cuáles son sus intenciones.
Durante los últimos días el exconcursante de Gran Hermano ha liderado un culebrón en torno a las filtraciones del chófer de las Campos. Con el paso de las jornadas fue desvelando algunos detalles del comportamiento de Gustavo con la familia de María Teresa. De alguna manera pretendía abrirles los ojos para desenmascarar al ayudante de la presentadora.
Kiko, sin embargo, se ha visto salpicado por uno de los chats que tenía con Gustavo. En la conversación también intervino Belén Rodríguez, con la que ambos mantenían una estrecha relación. A través de ese canal aprovechaban para burlarse de Carmen Borrego.
En las últimas horas se destapaba esto, lo que provocó el tremendo enfado de la hermana de Terelu. Señaló que "me parece cruel y asqueroso". Sobre todo porque pensaba que esas tres personas eran sus amigas.
Tanto a Gustavo como a Belén les conoce desde hace décadas. En el caso del tertuliano de Sálvame, su relación ha atravesado por unos cuantos altibajos, pero últimamente parecían llevarse de maravilla. Habían solventado sus diferencias.
Pero la situación empezó a deteriorarse en los últimos días después de que él anunciara que Gustavo tenía grabadas muchas conversaciones con las Campos. Eso hizo saltar todas las alarmas.
La hija de María Teresa se encuentra totalmente hundida. Siente que la han traicionado tres de las personas más importantes que tenía.
Kiko Hernández se ha encargado de darle la puntilla con los mensajes que han destapado. Ella no atraviesa por su mejor momento. Lleva varios meses sin hablarse con su hijo, la acusan de filtrar información de sus allegados y la relación con Terelu pende de un hilo.
Admitía que "no me encuentro bien, no estoy bien". Suponía para ella un duro golpe enterarse de todo lo que decían a sus espaldas. Descubrió que gente que consideraba de su familia "tienen un chat en el que se dedican a reírse de mí y de mi físico".
Todo eso le parecía muy desagradable. "Me duele por las personas que han estado dentro, han desaparecido para siempre de mi vida", añadió. Ha tomado una decisión firme con todos ellos, no quiere saber nada más de ellos.
"Estas personas no están en mi vida. Me duele muchísimo de mi amiga Belén Rodríguez. Pero esta vez ya no va a ser mi amiga más", adelantó.
Quiso aclarar el papel que había tenido cada uno de los participantes de ese chat. Trató de liberar de culpa al chófer.
Kiko Hernández se reía de ella
Kiko Hernández fue acusado de hablar mal de su compañera. Ahora tendrá que dar la cara y admitir sus errores.
Carmen Borrego confesó que "la persona que me ha pedido disculpas y que me lo ha enseñado ha sido Gustavo. Para que sepa qué cosas que se han contado no son así". Es el único de los tres implicados que se ha atrevido a darle explicaciones.
Aseguró que se había acusado al chófer "de subir fotos mías para reírse de mí y no ha sido así". Una de ellas era de su papada. Pero el encargado de compartir la imagen fue otra persona.
Kiko Hernández había sido el responsable de todo. Él se encargó de mandar la imagen para humillar a su compañera a través de un chat privado. Algo que la hermana de Terelu no conseguirá olvidar con tanta facilidad.
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