Kiko Hernández tuvo una tarde muy agitada en Sálvame. Es consciente de que su futuro en el programa corre serio peligro, sobre todo tras lo ocurrido en las últimas horas. Una vez más volvía a mostrarse muy duro con una compañera.
El tertuliano mantuvo un tenso enfrentamiento con la hermana de Terelu. En esta ocasión, el motivo de la discusión fue Gustavo, el chófer de María Teresa Campos. Volvía a ponerle en el punto de mira al situarlo de nuevo como el topo de la familia.
Kiko desveló que tenía nuevos datos sobre las presuntas grabaciones que habría hecho el asesor. Muchos de los que estaban en el plató eran incapaces de creerse lo que estaban escuchando. Pero él parecía dispuesto a demostrar que dice la verdad.
Aseguró que "llevo 14 años dando muy buenas informaciones. Esta no es que me llegue, es que la he vivido yo". Mientras tanto, Carmen permanecía en una sala escuchando lo que decían de ella.
El colaborador soltó que la habían grabado diciendo "burradas" sobre sus familiares, algo que molestó mucho a la hermana de Terelu. Amenazó con marcharse para casa. "Yo lo siento mucho, si me tengo que ir del programa, me iré, pero no voy a participar en hacer daño a mi madre", apuntó.
Insistió en que "no contéis conmigo, la situación sabéis todos la que es y creo que no es el momento", indicó. Hace unos pocos días, la veterana comunicadora tuvo que ingresar en un hospital por unos problemas de salud. Su familia trata de que permanezca lo más tranquila posible y todos estos comentarios no hacen más que alterarla.
Kiko Hernández siempre ha mantenido una relación de amor-odio con su compañera. Después de una época de distanciamiento, en los últimos tiempos se les había visto muy unidos. Pero la situación ha dado un giro radical tras lo acontecido este martes en el plató.
Discutieron en directo, con Carmen Borrego totalmente desquiciada. "Que hagas lo que quieras; si crees que es el momento de hacer esto, que Dios te lo pague", afirmó ella. Mientras la seguía por los pasillos de Telecinco le soltó que "no se puede ser tan cerdo y tan sucio".
Con los minutos la conversación se fue volviendo más tensa, elevando el tono los dos. "A mí no me toques", advirtió la tertuliana. "Te toco porque me da la gana", le respondió él.
Los dos protagonistas de esta historia acabaron en una sala en un intento por solucionar sus diferencias. La hermana de Terelu aseguró que "no quiero seguir participando de esto. Haced lo que queráis, poned mil grabaciones poniendo verde a mi familia, a mi sobrina...".
Advertía que "yo no estoy bien en este momento. No lo estoy y no puedo más". Estaba totalmente desbordada por la situación.
Kiko Hernández se llevó una sorpresa
Kiko Hernández parecía dispuesto a desenmascarar al chófer de la familia. Sin embargo, tuvo que cambiar sus planes sobre la marcha. Seguramente no esperaba que sus palabras le fueran a sentar tan mal a la colaboradora.
? Fran Antón logra que Kiko Hernández dé el paso final y ya no es un secreto
"Lo único que pido es que no me hagáis participar en este momento de esto, por favor", solicitaba ella. Estaba visiblemente enfadada con algunos de sus compañeros. "Aquí hay mucha gente que también es íntima amiga mía, que por lo visto, ha estado aquí y también se ha callado", recalcó.
Aseguró estar cansada de que siempre se cebaran con su familia. Pedía un poco de respeto para las Campos, y más en estos instantes.
Kiko Hernández tuvo que comprobar como tiraba su móvil contra el suelo y amenazaba con irse. "Me cago en la hostia puta. Ya está bien, todo tiene un límite en la vida y el límite ha llegado hoy", gritó la colaboradora cansada de tantas insinuaciones.
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