María Teresa Campos ha reaparecido tras ser ingresada hace unas semanas para someterse a unas pruebas médicas después de sufrir una caída. La veterana periodista está atravesando un momento muy delicado que mantiene en alerta a toda la familia.
Sus hijas no ocultan su preocupación ante el estado físico de la matriarca del clan y han confesado que atraviesan "una situación muy delicada". En plena polémica por la traición de Gustavo, su chófer, María Teresa ha sido vista saliendo de casa y su aspecto evidencia la realidad de su día a día.
María Teresa reaparece muy cambiada
Que María Teresa Campos se encuentra muy delicada de salud es algo que ninguna de sus hijas ocultan a los medios. A finales de diciembre, la presentadora sufrió una caída en su casa que le llevó directa al hospital. Sus hijas querían comprobar que todo estuviera bien y así lo confirmaron las pruebas médicas a las que se sometió.
No obstante, de un tiempo a esta parte, el estado anímico de Teresa ha sufrido un bajón considerable. Apenas come y bebe, y tampoco quiere recibir visitas en casa al margen de su familia. La angustia y la preocupación crecen entre su entorno que espera se vaya recuperando poco a poco.
La abuela de Alejandra Rubio necesita más que nunca el cariño de su familia que no la dejan sola en ningún momento. El pasado sábado 28 de enero, María Teresa decidió salir por primera vez de casa para acudir al cumpleaños de su nieta Carmen.
Lo hacía acompañada de su yerno, el marido de su hija pequeña, que la llevó hasta el domicilio de la colaboradora donde se celebraba la fiesta. El momento fue captado por la revista Diez Minutos donde se aprecia el verdadero estado de salud de la veterana presentadora.
Visiblemente más delgada, María Teresa se agarra del brazo de José Carlos que, pacientemente, le acompaña hasta su casa. Sus hijas están pendientes de ella en todo momento, ya que, como contaron, "come muy poquito y bebe menos". "A veces está deshidratada", señalaban.
Aunque ahora parece estar más recuperada y con ganas de salir, lo cierto es que el cambio resulta muy llamativo. A pesar de todo, estuvo durante horas en casa de Carmen y José Carlos pasándoselo en grande. Tras la fiesta, su yerno volvió a acompañarla hasta su domicilio.
María Teresa Campos experimenta una leve mejoría
María Teresa tuvo un fin de semana de lo más ajetreado. Cosa que alegra y tranquiliza a los suyos tras verla últimamente muy decaída. Y es que hace semanas que la periodista se niega a ver a sus amigas con las que compartía su tradicional partida de cartas.
Su decisión llenó de angustia a Terelu pues sabe lo mucho que disfrutaba de estas reuniones y lo que suponían para ella. Sin embargo, parece que poco a poco se va encontrando algo mejor y disfruta más de sus salidas junto a Gustavo.
Al día siguiente de la celebración en casa de su hija Carmen, Teresa acudió a casa de Terelu acompañada de su inseparable Gustavo. Está claro que no conoce la polémica que gira en torno a su hombre de confianza y sigue contando con él en todo momento.
Para Terelu y Carmen resulta primordial mantener al margen de todo a su madre y, sobre todo, seguir contando con Gustavo. El chófer es alguien muy especial en la vida de toda la familia, pero especialmente para María Teresa.
De hecho, Gustavo está resultando de gran ayuda en estos difíciles momentos y sufre como el que más con el delicado estado de salud de su jefa. "Estar equis horas con mi madre en estos momentos no es fácil para nadie", confesaba hace unos días la presentadora de Sálvame.
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