Un frío más intenso de lo esperado
Este viernes, se anticipa un notable descenso de las temperaturas en diversas regiones de España. Una masa de aire polar se desplazará por parte de Europa, provocando un frío más intenso de lo habitual para esta época del año.
Aunque estamos en pleno invierno, este descenso térmico será más pronunciado de lo que suele ser en febrero en España. Mario Picazo ha advertido sobre esta situación en sus redes sociales, acompañando su predicción con un mapa que muestra las anomalías de temperatura en Europa.
Según Picazo, entre el 7 y el 14 de febrero, gran parte del sur de Europa experimentará temperaturas por debajo de los valores promedio para esta época. En algunos casos, las temperaturas serán gélidas.
Anomalías térmicas de hasta 3 grados menos
El mapa compartido por Picazo indica que, desde este viernes y durante la semana siguiente, las temperaturas en España podrían estar hasta tres grados por debajo de la media habitual. Sin embargo, la intensidad del frío no será uniforme en todo el país.
En el sur, las temperaturas solo se reducirán en uno o dos grados respecto a lo normal, por lo que la variación no será tan destacada. Sin embargo, en el nordeste peninsular y las áreas del Mediterráneo, el frío se sentirá con más intensidad, registrándose descensos térmicos mucho más pronunciados, y las temperaturas serán más frías que las de inviernos anteriores.
Un episodio de frío que marcará la próxima semana
El descenso térmico anunciado por Mario Picazo se prolongará durante varios días, acompañado de heladas en el interior peninsular y posibles nevadas en cotas más bajas de lo habitual.
Las bajas temperaturas podrían hacerse sentir con más intensidad a comienzos de la próxima semana, momento en el que se espera que los valores mínimos desciendan a cifras poco habituales para un mes de febrero en distintas zonas del país.
Los meteorólogos instan a la población a mantenerse informada sobre las previsiones del tiempo, ya que el impacto de la llegada de aire polar podría diferir según la zona. Lo que resulta innegable es que el frío no ha dado tregua, y España afronta un descenso térmico más pronunciado de lo habitual para este periodo del año.