La vida de Rocío Arauz, presentadora de televisión en España, se rompió el pasado 3 de noviembre con la pérdida de su madre. Mariángeles, de 70 años, falleció víctima de un cáncer de color con metástasis. La periodista ha denunciado el tratamiento médico que recibió su madre durante años.
Según ha explicado Rocío, le diagnosticaron el cáncer demasiado tarde a pesar de que llevaba años sufriendo los dolorosos síntomas. Al parecer los médicos atribuían sus gritos de dolor y sus quejas a su salud mental. Pero ni siquiera con una severa depresión la atendieron con prioridad en Salud Mental.
Rocío necesitaba canalizar de alguna forma su rabia y su impotencia, y lo ha hecho a través de un hilo en Twitter. La denuncia de la periodista lleva ya más de 10.000 retuits, 16.000 Me gusta y miles de comentarios. Su relato describe el sufrimiento de su madre, de una manera que pone los pelos de punta.
Intentó quitarse la vida
Según explica, su madre llegaba al hospital deshidratada, con delirios y sin voz. Su estado empeoró en agosto, cuando empezó a padecer dolores insufribles hasta el punto de no poder levantarse de la cama. “Pedía ayuda a gritos, chorreaba en sudor, temblaba”, afirma Rocío en su mensaje.
Además, su madre no podía comer y había perdido más de 20 kilos en tan solo un mes. Visitó decenas de especialistas, fue de hospital en hospital tanto en la sanidad pública como en la privada, y no encontró la ayuda que necesitaba. Los médicos le daban medicamentos contra el dolor, y la enviaban a casa.
El dolor que sufría era tan cruel que llegó a intentar quitarse la vida, recuerda desconsolada Rocío. “Cuando después del peregrinaje por fin dieron con la justificación de sus dolores, ya era demasiado tarde. La metástasis le había provocado un fallo multiorgánico” que la llevó a la muerte, añade.
El alegato de la presentadora
Rocío Arauz ha sido presentadora y reportera en Antena 3 Noticias, Cuatro, TVE, Mega y Telemadrid. Actualmente trabaja en Hoy en Día de Canal Sur, siendo un rostro conocido del canal andaluz. En las últimas horas se ha hecho viral por su mensaje, denunciando el trato que recibió su madre.
“Mi madre no ha podido luchar, no la han dejado pelear contra el cáncer no diagnosticado que se la ha llevado”, denuncia. “Ha agonizado a alaridos durante años sin ser atendida, ha sufrido un trato denigrante y vejatorio con un falso diagnóstico de demencia. A él se aferraban cuando gritaba de dolor pidiendo auxilio”, añade.
La periodista lamenta que la salud mental de Mariángeles haya servido como pretexto para la falta de atención. Y asegura que “es humillante que con esas hipótesis y la evidente depresión que le produjo su inhumana situación, tampoco considerasen de extremada prioridad tratarla desde Salud Mental”.
A su lado hasta el final
Rocío recuerda a su madre llorando y tirada en el pasillo de Urgencias “con un cáncer que la estaba devorando”. Y mientras, los doctores le miraban a los ojos y le decían que su madre no tenía nada y lo hacía para llamar la atención. Aun así, los seres queridos de Mariángeles nunca dudaron de ella.
“La conozco y sabía que le pasaba algo”, afirma la periodista de Canal Sur, aunque esto no le ha ahorrado el sufrimiento. En los primeros análisis aparecieron los marcadores tumorales muy altos. El tac craneal mostraba metástasis en el cerebro, y el tac abdominal indicaba que tenía el colon perforado.
Según explica, su madre estaba ya tan mal que incluso “había sufrido un infarto del que ni siquiera se había quejado”. La metástasis le provocó un fallo renal que desencadenó una encefalopatía urémica. Esto le distorsionó el sentido de la percepción en sus últimos días, y tampoco podía comunicarse.
Solo en las últimas horas recuperó la lucidez para despedirse de ella, y ese es el único consuelo que le queda a Rocío. “Me dijo que me quería muchísimo, que quería venirse a casa conmigo, nos besamos y nos abrazamos”, recuerda. Mariángeles murió, tras años de sufrimiento, abrazada a su hija.