Miguel Marcos asume con resignación los problemas con Belén Esteban. La situación ha cambiado mucho en los últimos meses, sobre todo a partir del percance que sufrió ella. Lo han intentado todo, pero no consiguen recuperar la mejor versión.
Ella viene de una época muy complicada tras recuperarse de una grave caída que la obligó a pasar varias veces por quirófano. Las molestias y las constantes recaídas la dejaron muy tocada. Nada conseguía animarla.
Miguel Marcos no se separó de su esposa en ningún instante. Fue una etapa muy delicada, en donde lo veía todo muy negro, costándole mucho levantar el ánimo. Tuvo que causar baja en Sálvame y renunciar a todos los proyectos que tenía en marcha, entre ellos la promoción de sus productos de alimentación.
Belén volvió al trabajo al cabo de cinco meses, mucho antes de lo que se pensaba inicialmente. Admitía que lo hacía con intención de ayudar al programa, que estaba sumido en una profunda crisis de resultados. Reapareció en muletas y para que estuviera más cómoda le pusieron un sillón.
Pese a que ha trabajado muy duro en los últimos tiempos con los rehabilitadores, aún no se encuentra recuperada del todo. Le han quedado secuelas, como se ha podido comprobar recientemente en su programa. Jorge Javier le pedía a la de Paracuellos que se arrodillara en el plató.
Ella se lo pensó dos veces, confirmando que le resultaría complicado volverse a poner de pie. "Me arrodillo, pero luego me tienes que ayudar a levantarme, si no no me puedo levantar", dijo. Pero la dirección del espacio trató de ayudarla y puso a su disposición unos cuantos cojines para que le resultara más fácil la actividad.
Miguel Marcos sabe que una lesión de estas características requiere de mucha paciencia, de tomarse las cosas con calma. Después de casi un año de recuperación, la pierna todavía se resiente, experimentando algunos problemas de movilidad. Pero eso no supone ningún problema para Belén Esteban.
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La colaboradora asume que está lejos de estar al 100 por ciento. Le resta trascendencia a estos contratiempos al comprobar que se trata de un proceso muy lento. Pero poco a poco se va sintiendo mejor.
Para superar este mal trago, la ex de Jesulín tuvo que acudir a terapia. Gracias a la ayuda de profesionales pudo recuperarse con gran rapidez. Cuando en septiembre regresó a su puesto confirmaba que tenía el "alta por mejoría".
Se había propuesto volver "para que mi cabeza esté mucho mejor, y volver a mi vida normal". Recuperar los hábitos de antes le iban a permitir estar mucho más entretenida, sin darle tantas vueltas a la cabeza.
Miguel Marcos fue su gran apoyo
Miguel Marcos se convirtió en su gran apoyo, consiguiendo que la recuperación no se le hiciera tan cuesta arriba. En los momentos de bajón él siempre aparecía para dedicarle unas palabras de ánimo. Sobre todo al principio, cuando los dolores y la poca evolución iban a hundirla.
En los últimos tiempos se la ve mucho más animada y participativa en su programa. Pese al incordio que supuso la lesión, la pareja no dudó en realizar unas cuantas escapadas a lo largo de estos meses. Les sirvió para cargar pilas y volver con más fuerza al trabajo.
Los problemas anímicos ya parecen olvidados, así que ahora todos los esfuerzos se concentran en la recuperación de la pierna. Procuran tomarse las cosas con tranquilidad, sin acelerar los plazos.
Miguel Marcos es consciente de que lo importante es que se recupere del todo y que no queden secuelas. Belén Esteban no quiere pasar por alto lo mucho que le ha ayudado en este proceso su marido.