Han transcurrido dos semanas desde que Silvia Bronchalo viajara hasta Tailandia para seguir de cerca el caso de su hijo, Daniel Sancho. Concretamente, desde que al joven le permitieron recibir visitas en la cárcel de Koh Samui, donde se encuentra tras ser acusado de asesinar y descuartizar a Edwin Arrieta.
Desde entonces, a su madre únicamente se la ha visto en las proximidades de la prisión. Sin embargo, recientemente, Y ahora Sonsoles ha conseguido imágenes en exclusiva en las que se ha visto a Silvia Bronchalo lejos de la cárcel tailandesa y en ambientes muy distintos.
Silvia Bronchalo, pillada lejos de la cárcel de Daniel Sancho
Y ahora Sonsoles ha capturado las primeras imágenes que se han podido ver de Silvia Bronchalo en un contexto diferente que no fuera la cárcel.
En dichas instantáneas, se ha podido ver a la madre de Daniel Sancho por primera vez sin gafas de sol, las cuales eran las que le ocultaban su expresión. En esta ocasión, Silvia Bronchalo ha lucido unas gafas graduadas, las que han permitido que se viera su rostro al completo.
A diferencia de las primeras veces que se la vio con rostro decaído, en estas fotos publicadas por el programa se la ha observado con una actitud mucho más relajada. Pese a las circunstancias, Silvia Bronchalo aparece en estas fotos incluso sonriendo y no con la seriedad que le ha caracterizado hasta ahora.
Es más, en ellas no estaba sola, sino acompañada por dos hombres con los que comió en un restaurante de la isla. Por el momento, se desconoce las identidades de los sujetos, pero todo apunta a que podrían ser familiares o amigos de la retirada actriz.
Silvia Bronchalo se instala en Tailandia
Por otro lado, desde Y ahora Sonsoles, también confirmaron que Silvia Bronchalo planea hospedarse durante un tiempo más en Tailandia. La razón de ello es que ya ha dejado de alojarse en el hotel donde ha estado permaneciendo en las dos semanas que lleva en la isla asiática.
Ahora, la expareja de Rodolfo Sancho se ha alquilado un bungalow, el cual se encuentra muy cerca de la cárcel donde está su hijo. De hecho, esta cabaña estaría tan próxima a la prisión que incluso Silvia Bronchalo podría desplazarse caminando, sin necesidad de disponer de un vehículo de transporte.