El martes 24 de septiembre, Julián Muñoz, exalcalde de Marbella, falleció tras una larga batalla contra un cáncer de pulmón. Su familia, especialmente Elia Muñoz, su única hija biológica, estuvo a su lado en todo momento. A pesar del apoyo, la pérdida ha dejado a Elia completamente desolada.
Elia Muñoz, la misma lucha que su padre
Elia sabe muy bien lo que significa enfrentarse al cáncer. En enero de 2022, fue diagnosticada con esta enfermedad, lo que marcó un giro en su vida. Durante más de un año, luchó con valentía y logró vencerlo, algo que describió como una prueba dura pero transformadora.
“Estoy en recuperación y poco a poco, con todo, estoy muy positiva”, comentó en 2023, dejando claro que la actitud es clave en la lucha contra el cáncer. Tras superar este difícil periodo, retomó sus actividades con pasión, especialmente el arte y la pintura.
Junto a su esposo, Raúl Barriocanal, decidió dar un paso más y abrir una tienda de productos gourmet en el Mercado Municipal de Marbella. Según hemos sabido, ha tenido una gran acogida entre los vecinos. Este proyecto les permitió reinventarse como empresarios y consolidar una nueva etapa en su vida.
Una despedida cargada de amor
Durante los últimos días de Julián Muñoz, Elia no se separó de su lado. En el hospital de Marbella, donde estaba ingresado, trató de insuflarle fuerzas a pesar de que su estado de ánimo y salud se debilitaban rápidamente.
Hace apenas cuatro días, con optimismo, compartió con los medios que su padre parecía estar mejorando. “Esperemos que quede mucho camino por recorrer todavía”, dijo, aunque el desenlace finalmente la sorprendió.
El legado de Julián Muñoz incluye más que polémicas. También deja el recuerdo de un hombre que, en sus últimas horas, se reconcilió con su familia. La misma Elia expresó que ese cariño fue vital para su padre en el tramo final.
Comenzar de nuevo
Hoy, Elia enfrenta la difícil tarea de reconstruir su vida tras la muerte de su padre. Aunque el duelo es inmenso, tiene en su familia, su arte y su negocio motivos para seguir adelante. En su lucha contra el cáncer, demostró una fortaleza admirable que, sin duda, será clave en este nuevo capítulo.
La historia de Elia Muñoz es un ejemplo de resiliencia, donde las adversidades no solo marcan finales, sino también comienzos.