España se prepara para un notable cambio en el tiempo en las próximas horas. La borrasca Éowyn, asociada a una ciclogénesis explosiva, llegará con fuerza, trayendo lluvias generalizadas, fuertes rachas de viento y un descenso marcado de las temperaturas.
La borrasca comienza a impactar en el noroeste
Los efectos de Éowyn se notarán especialmente este viernes 24 de enero, afectando sobretodo las costas gallegas. En esta zona, los avisos naranjas se activarán debido al intenso oleaje y los vientos, que podrían alcanzar los 80-100 km/h. Además, habrá alertas amarillas en Galicia y la cordillera cantábrica por las rachas de viento que afectarán tanto a las áreas costeras como a las zonas montañosas.
En el resto de la península, la jornada será más tranquila. Se mantendrán cielos mayormente despejados, con temperaturas que aún se situarán dentro de valores agradables para la época. Sin embargo, este panorama cambiará rápidamente durante el fin de semana, a medida que Éowyn avance por el país.
Lluvias intensas y bajada de temperaturas el sábado
El sábado 25 de enero marcará el punto álgido del temporal. El frente comenzará a cruzar la península desde el oeste, dejando lluvias abundantes en Galicia, el sistema Central y la cordillera cantábrica. Las precipitaciones también afectarán, aunque de forma más moderada, al resto del interior peninsular.
En el área mediterránea y las islas Baleares, las lluvias serán menos probables y, en caso de producirse, serán de carácter débil. A lo largo del día, las temperaturas experimentarán un notable descenso, especialmente en el norte y el interior. Este cambio traerá nevadas en zonas de montaña, con cotas iniciales en torno a los 1.400-1.800 metros, descendiendo hasta los 1.000-1.200 metros al final de la jornada.
Domingo: posible llegada de un nuevo frente
El domingo 26 de enero podría traer un breve respiro al inicio del día, pero las lluvias volverán con un nuevo frente que afectará sobre todo al oeste de la península. Las precipitaciones continuarán siendo protagonistas en este patrón invernal marcado por la influencia de borrascas atlánticas sucesivas.
La recomendación de Brasero para los próximos días es clara: precaución ante los fenómenos meteorológicos adversos, especialmente en zonas costeras y de montaña.