A partir de enero de 2025, los autónomos en España tendrán nuevas condiciones en sus pensiones de jubilación. Estas estarán marcadas principalmente por los años cotizados y la base por la que hayan contribuido a la Seguridad Social. Este cambio forma parte de los ajustes anuales que buscan adaptar el sistema a las realidades económicas y garantizar la sostenibilidad del modelo.
La Seguridad Social confirma el cambio en la jubilación de los autónomos
La edad ordinaria de jubilación para los autónomos será de 66 años y 8 meses, siempre que no se alcance el mínimo de 38 años y 3 meses de cotización. En caso de superar este periodo, será posible jubilarse a los 65 años con derecho al 100% de la pensión.
Este requisito de cotización es clave para determinar la cuantía que recibirá cada autónomo, ya que influye directamente en el porcentaje de la base reguladora que se aplica. La base reguladora se calcula tomando como referencia las bases de cotización de los últimos 25 años. Esto refuerza la importancia de planificar cuidadosamente las aportaciones durante la vida laboral.
Los autónomos con 15 años cotizados accederán al 50% de la base reguladora, y con 36 años y 6 meses, al 100%.
A partir de 2025, los incrementos en el porcentaje aplicable dependerán del tiempo cotizado adicional. Esto significa que cada mes extra entre los años 16 y 36 aporta un pequeño porcentaje adicional que se suma al total. Este sistema beneficia a quienes han mantenido una cotización constante a lo largo de su trayectoria profesional.
La base de cotización elegida por el autónomo tiene un impacto directo en la cuantía final de su pensión. En 2025, la base mínima de cotización será de 960,78 euros, mientras que la máxima alcanzará los 4.918,75 euros.
La mayoría de los autónomos cotiza por la base mínima, lo que genera pensiones más bajas que las del Régimen General. Según datos actuales, la pensión media de un autónomo ronda los 965 euros, frente a los 1.604 euros de los asalariados.
Para mejorar la pensión, se recomienda que los autónomos aumenten su base de cotización durante los últimos años previos a la jubilación. Sin embargo, debido al cálculo basado en los últimos 25 años, es fundamental planificar con antelación. Este enfoque puede marcar una diferencia significativa en el importe mensual que se recibirá durante la jubilación, garantizando una mayor estabilidad económica.
La pensión de los autónomos en 2025 dependerá tanto de los años cotizados como de las bases de cotización elegidas. Es crucial que los trabajadores autónomos valoren estas variables y planifiquen su jubilación con tiempo, para garantizar una pensión adecuada a sus necesidades futuras.