Paloma Cuevas está en el centro de la noticia porque ya no esconde su relación con Luis Miguel, todo lo contrario. Le ha invitado a la boda de Daniel Clará, el hijo de su querida amiga y compañera Rosa Clará, y las cámaras les han pillado. En un primer momento Cuevas intentó ser silenciosa, pero ya no tiene que guardar las formas y le da igual lo que piense Enrique Ponce.
Paloma Cuevas ha tenido muchos problemas con su exmarido, les ha resultado complicado llegar a un acuerdo de divorcio. Cuando estaba todo hecho Enrique se dio cuenta de que Cuevas había empezado una relación con Luis Miguel y regresó la tensión. El torero era amigo del cantante y consideró una traición que este conquistara a la diseñadora justo después de la separación.
Paloma siempre ha negado la mayor, a pesar de que evita aparecer en público para no tener que hablar de temas comprometidos. Recientemente la revista ¡HOLA!, su publicación de cabecera, ha compartido unas fotos que demuestra en qué punto se encuentra. Tal y como dicen sus amigos, está más enamorada que nunca, mucho más relajada y feliz.
Paloma, según el material que ha salido publicado, ya no se esfuerza en disimular: está enamorada y le da igual que se sepa. Luis Miguel no se ha separado de ella y ha estado muy atenta durante la boda del hijo de Rosa Clará. Ha sido en París y Cuevas se ha convertido en el centro de todas las miradas por el vestido que ha elegido para la ocasión.
Paloma Cuevas consigue que Luis Miguel pase a la acción
Paloma no quería hacer pública su relación con Luis Miguel, pero a él tampoco le interesaba que le vincularan con ella. Quiere hacer carrera en la música, es un gran artista y su intención es no mezclarse en determinados ambientes. Sin embargo, sus sentimientos hacia la ex de Enrique Ponce siempre han sido un secreto a voces.
Supuestamente Luis Miguel siempre ha tenido fijación por Cuevas, tanto es así que en una ocasión le hizo un regalo millonario. Todavía no estaban juntos, eran amigos y tuvieron una cita informal. El cantante cogió su avión privado par comprar un disco en otro país y entregárselo a la diseñadora.
Paloma ha conseguido que su novio pierda el miedo y por fin han acudido a un evento sin esconderse de los paparazzi. Sí, les han pillado, pero las fotos les dejan en buen lugar: demuestran que están enamorados y que la relación va en serio. Hay medios que incluso aseguran que este romance podría terminar en boda, pero solo el tiempo lo dirá.