Xisca y Rafa Nadal se han convertido en los verdaderos protagonistas del primer Gran Slam del 2023. El tenista mallorquín ha viajado hasta Melbourne, Australia, para disputar el campeonato que pondrá en jaque su estado físico y mental. Junto a él, han viajado su mujer y su hijo, que no se han separado desde que Rafael Jr. llegó al mundo.
De esta manera se confirma que Mery Perelló es el apoyo fundamental de su marido y que nada le impide estar junto a él en las gradas. Sobre todo ahora que Nadal se encuentra en un momento muy delicado y que todos los ojos están puestos en su capacidad deportiva.
Rafa necesita todo el apoyo posible
Nadal disputará en unas horas el Abierto de Australia donde competirá contra los mejores tenistas. Hace meses que el de Manacor atraviesa graves problemas físicos derivados de la lesión crónica que padece en su pie izquierdo. Como consecuencia, los campeonatos que ha disputado se han visto afectados de manera considerable.
No obstante, el español no está dispuesto a arrojar la toalla y sigue adelante con sus compromisos profesionales. Reconoció que no está en su mejor momento, pero todavía no ha llegado al límite para pensar en su retirada.
Junto a él se encuentra su mujer Xisca y, como novedad, este año también su hijo de apenas tres meses. La familia al completo ha viajado hasta Australia para apoyar a Nadal y confían en que esto le dará fuerzas para disputar los partidos.
Desde que se convirtió en padre, Rafa no se ha separado de los suyos. De hecho, con tan solo un mes, Rafa Jr. viajó hasta Turín donde su padre disputó el Torneo de Maestros. Para el mallorquín estar cerca de su hijo resulta fundamental y le ayuda a tener la mente más despejada.
"Siempre ha sido duro irme de casa para jugar, sinceramente, pero ahora con mi hijo más aún", manifestó. Razón por la que Xisca ha decidido que la familia al completo acompañe a Nadal en sus competiciones.
Xisca no se separa de su familia
Xisca no se lo pensó dos veces a la hora de decidir acompañar a su marido a tierras australianas. Desde que dio a luz, la joven empresaria no ha parado ni un solo momento viajando a todas las ciudades donde Nadal ha competido.
Hace tan solo unos días la vimos sufriendo en el campeonato que el tenista español disputó en Sidney donde fue derrotado por Álex de Miñaur. Ahora, la familia al completo se ha trasladado hasta Melbourne en el Gran Slam que se disputará en unas horas.
Para la mujer de Nadal acompañarle en sus campeonatos es algo totalmente normal, sin embargo este año existe una novedad, el primer hijo de la pareja. Xisca sabe que esta competición es de vital importancia para el tenista después de los duros momentos por los que le ha tocado pasar.
"Los últimos meses no han sido fáciles para mí, mi principal objetivo ahora es encontrar buenas sensaciones en la cancha", manifestó hace días. Nadal fue expulsado de la United Cup y es evidente que a nivel profesional no está en su mejor momento.
Y es ahí donde Xisca juega un papel fundamental. Ella es la encargada de darle esta estabilidad emocional que necesita viajando junto al bebé para que Rafa se sienta apoyado y arropado. Al tenista le resulta muy duro separarse de él cuando tiene que competir fuera y es por ello que se ha convertido en un habitual en sus viajes.
Convertirse en padre ha modificado la vida personal del manacorí y no puede esconder una sonrisa cuando le preguntan sobre el pequeño. Aunque evita exponer su vida privada a los medios, recientemente hizo referencia a su bebé. "De momento va bien", confesó en una entrevista a Manu Carreño.
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