Raphael, el cantante, actor y artista, cumple 80 años en activo. El de Linares, además, celebra también este año seis décadas subido a un escenario. Durante todos estos años de carrera musical solo hubo algo que le detuvo, una situación dolorosa que ahora ha decidido contar públicamente.
Para el artista "el pasado no existe", él siempre está "pensando en el mañana, buscando el calor del público". Una filosofía de vida con la que muchos no estarán de acuerdo. Todo lo contrario, el pasado de Raphael es su gran legado, sus canciones son la banda sonora de varias generaciones.
Desde su juventud supo lo que era trabajar duro para poder sobrevivir, su padre se ganaba la vida como albañil y su madre limpiando casas. La primera vez que Rafael Martos Sánchez acudió a una sala de cine descubrió su vocación de artista. Un medio de vida que le ayudaría a sacar de la precariedad a su familia.
Para el artista de Linares "el pasado no existe"
A los 16 años comenzó su andadura profesional como cantante. A los 22 dio un concierto como solista en el Teatro de la Zarzuela de Madrid, un año después representó a España en Eurovisión por primera vez con Yo soy aquel.
Una trayectoria en la que ha grabado casi 80 álbumes y vendido millones de copias en todo el mundo. Además, ha intervenido en 15 películas y ha ofrecido más de una decena de giras. Giras en las que cada noche colgó, y continúa haciéndolo, el cartel de “completo”.
A Raphael le obsesiona mirar al futuro. “No me gusta echar la vista atrás, pero mi vida ha sido y es una vida de trabajo maravilloso que tengo la inmensa suerte de poder seguir ejerciendo. Y, por supuesto, siendo parte de una familia inmejorable”.
El artista ha hecho de su gestualidad, su fuerza en el escenario, su potente voz y sus movimientos algo amanerados su sello inconfundible. En Las Vegas sufrió su primer gran problema de salud con una fatiga mental que le obligó a parar. Sin embargo, este no ha sido el único percance sufrido en todos estos años de carrera.
Raphael desvela cuál fue uno de los peores momentos de su vida
El cantante estuvo un tiempo retirado en abril del 2003, el artista se vio obligado a someterse a un trasplante de hígado. "En ese momento mi vida se iba, además, por una memez que fui aumentando sin darme cuenta y todo por dormir, por dormir, por descansar... Se formó una pelota que pudo costarme la vida", explicaba el artista.
El cantante, más sincero que nunca, ha reconocido el duro trance por el que pasó: "Ahí comenzó mi segunda vida. Dormía muy mal y bebía por las noches botellitas pequeñas de los minibares de los hoteles para dormir mejor, sin darme cuenta de que me estaba pudriendo un órgano imprescindible. Desde que me trasplantaron pude dormir como un lirón", declara el andaluz.
Raphael siempre ha contado con el apoyo de su mujer, Natalia Figueroa, aristócrata y periodista, con quien consolidó una relación por la que nadie apostaba. Es padre de tres hijos, Jacobo, Manuel y Natalia y abuelo de ocho nietos. Una familia a la que adora por encima de todo y de la que no se puede sentir más orgulloso.
El cantante avisa: “Lo mejor está por llegar”. Hoy cumple 80 años, próximamente 60 como cantante y lo celebrará ante su público. En el mes de julio comienza una gira en la que ofrecerá 17 conciertos que le llevarán, por ejemplo, a Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Zaragoza, Pamplona y Marbella.