En la mágica costa de Galicia, existe un pueblo que ha logrado captar la atención de Amancio Ortega, fundador de Inditex y una de las figuras más influyentes del panorama empresarial. Este rincón de las Rías Baixas combina la serenidad de un pequeño pueblo marinero con una belleza natural que lo convierte en un lugar único para desconectar del bullicio.
Aldán: un lugar donde la calma reina
Aldán, enclavado en la ría que lleva su nombre, es conocido por ser uno de los destinos más auténticos y menos masificados de las Rías Baixas. Este pequeño pueblo pesquero conserva su esencia tradicional, con un puerto pintoresco y playas de aguas cristalinas que parecen sacadas de una postal.
La ría de Aldán, la más pequeña de la zona, es un lugar donde la naturaleza se muestra en todo su esplendor. Rodeada de montañas, bosques y el azul profundo del Atlántico, se ha convertido en el refugio perfecto para aquellos que buscan tranquilidad. Entre ellos, destaca Amancio Ortega, quien ha encontrado en este rincón gallego el espacio ideal para relajarse, lejos del bullicio y los negocios.
Historia y naturaleza en cada rincón
Aldán no solo destaca por su entorno natural, sino también por su riqueza histórica. Entre sus atractivos más conocidos están los petroglifos de Herbello, grabados que datan de la Edad de Bronce y que son un testimonio de la historia milenaria de la región. También se encuentra un antiguo sarcófago medieval, un vestigio de la influencia germánica en la península durante el siglo V.
Uno de los puntos más mágicos de Aldán es el Bosque Encantado de O Frendoal. Este paraje natural, situado junto al río Orxás, combina elementos históricos y naturales en un entorno único. En él se pueden encontrar un pequeño castillo medieval, un acueducto, un puente de piedra y una tumba que parecen sacados de un cuento. La ruta por este bosque es ideal para disfrutar en familia y permite conectar con la esencia más pura de Galicia.
Playas que conquistan a cualquiera
Las playas de Aldán son otro de sus grandes atractivos. Con un total de nueve playas, como las de Os Picos, Areacova, San Cibrán y Francón, este lugar ofrece una variedad de paisajes que se adaptan a todos los gustos. Sus arenas blancas y aguas cristalinas son perfectas para pasear, descansar o simplemente disfrutar del impresionante paisaje que regala el Atlántico.
Aunque las aguas de esta zona son conocidas por su frescura, el encanto de estas playas radica en su tranquilidad y en la conexión que permiten con la naturaleza. Es fácil entender por qué Aldán se ha convertido en el lugar favorito de una figura como Amancio Ortega, quien valora la discreción y la paz por encima de todo. Este rincón gallego es mucho más que un destino turístico; es un refugio que mezcla historia, naturaleza y tranquilidad.