Queda claro que la relación entre Letizia y su suegra, doña Sofía, nunca ha sido la mejor. Y ninguna de ellas intenta esconder ya la tensión existente entre ambas.
El último episodio en el que pudimos la frialdad que existe entre ambas fue durante la ceremonia de los Premios Princesa de Asturias, en el Teatro Campoamor de Oviedo.
Allí, Letizia ignoraba por completo a su suegra, y al terminar el acto ni siquiera se dirigieron una mirada. Eso, a pesar de que protagonizaban un posado familiar.
Por otro lado, queda claro que a la emérita nunca le ha gustado el comportamiento de Letizia con don Juan Carlos y muchos menos con sus hijas, las infantas Cristina y Elena.
Desde un primer momento, tanto Letizia como Felipe se han visto obligados a tomar decisiones drásticas para salvar la Institución.
Aunque tampoco ayuda mucho que ambas se enfrenten en público, como pudimos comprobar durante la famosa misa de Pascua de 2018.
Lamentablemente, la buena imagen que se tenía de la esposa del rey Juan Carlos ha caído en picado. Y es Pilar Eyre la que mostraba el lado más oscuro de la personalidad de la emérita, compartiendo detalles que hasta ahora desconocíamos.
La teoría que asegura que Juan Carlos I está en España: Las pruebas
"Mi percepción de la Reina Sofía ha cambiado. Antes la veía como una mujer responsable, sacrificada, sumisa, en cierta manera incluso maltratada", comentaba la periodista hace poco.
"Una víctima de su marido y luego mi percepción ha ido cambiando y lo que veía como sumisión veo que es ambiciosa, que ha aguantado todo al Rey Juan Carlos lo hace porque le gusta ser Reina y no quiere dejar de serlo", sentenciaba.
La cara oculta de Sofía que muchos desconocían
"Antes me daba pena y ahora me da rabia que no diga que se quiere divorciar", señalaba Eyre sobre la suega de Letizia. Y es que ella misma compartía las temidas palabras que le había dicho Sofía a su marido.
"'Ya sabes que no te vas a divorciar de mí, jódete porque sabes que nunca te vas a poder divorciar de mí'. Y el rey ha intentado divorciarse dos veces".
Mientras que don Juan Carlos parece haberse conformado con esa situación. "Está muy tranquilo, está muy bien, está muy cuidado desde el punto de vista clínico, está feliz, recibe visitas de sus amigos y sus amigas. Ahí no molesta a nadie y no tiene que estar con la Reina Sofía".
Hace tiempo que Eyre desmontaba el papel de doña Sofía y la dejaba como "una compradora compulsiva".
"Yo escribo libros sobre la familia real desde hace muchos años y quería que la reina me cayera bien, la veía una mujer sometida al marido y sacrificada", apuntaba.
"Pero a pesar de todos los esfuerzos que yo hacía cuando yo preguntaba si Sofía no sabía nada de lo de Juan Carlos, todo el mundo me decía que no solo lo sabía sino que le animaba en esa dirección".
La periodista llegaba a insinuar que "le gustaría que pasara a la historia como lo que ha sido: una reina egoísta. Como también lo ha sido el rey".
E incluso culpaba a Sofía de que la familia real sea disfuncional. "No sabe cuidar a sus hijas y solo centró sus atenciones en Felipe VI", la acusaba abiertamente.
Eso, sin contar con que "no tiene amigas, vive absolutamente aislada". Así, destacaba que es una mujer "codiciosa y su única ambición en este momento es ser la madre del rey".
Además, deja claro que la suegra de Letizia estaría al tanto de todos los movimientos que ha podido hacer don Juan Carlos.
"Si el rey le ha estado pasando tanto dinero a sus amantes como hemos visto estos años, con más motivo le pasará a su mujer y a sus hijas. A mí no me extrañaría nada que tuvieran un fondo común y que la Reina echara mano de él".