Rocío Carrasco sigue ofreciendo detalles acerca del calvario que vivió al lado de Antonio David y ahora también recurre a testigos que presenciaron de primera mano sus malos tratos.
Durante las últimas semanas, son varias las personas que han ido desfilando por el plató de En el nombre de Rocío dando fe de las palabras de Rociíto.
Entre ellos, José María Franco, quien fuese chófer de Rocío Jurado y que en un primer momento apoyaba a Antonio David.
Algo de lo que se mostraba muy arrepentido. "Me arrepiento de lo que he hecho. Fui manipulado por él. Quiero pedir disculpas porque le he hecho bastante daño", reconocía entre lágrimas.
"Tampoco me dijo nada. Cuando estaba en casa del Jurado me decía: 'David no es cómo tú piensas'. He tenido mala conciencia y he llorado muchas veces", admitía al respecto.
De hecho, incluso llegaba a pedirle perdón en pleno directo a la hija de 'la más grande'. "Siento haber sido tan mala persona contigo. El tío este es un embaucador y siempre venía llorando a casa", se sinceraba Franco.
"Mi mujer y yo hemos caído como idiotas. Lo siento de verdad. Para lo que me necesites, aquí estoy".
Pero él no es el único que se ha animado a hablar, y es que también Tony Rodríguez, ex guardaespaldas de Carrasco, ha querido relatar los malos tratos que pudo presenciar.
Rodríguez explica que ha visto a Antonio David faltarle al respeto psicológicamente a Rocío Carrasco. Confiesa que él era muy prepotente y que la tenía dominada.
Alega que la insultaba, que la cogía del brazo y la zarandeaba. También reconoce que delante suyo la ha insultado y dicho cosas muy fuertes. Ante estas palabras, Tony le da veracidad al testimonio de Rociíto.
Rocío Carrasco recurre a otro testigo para validar su testimonio
Además, contaba las numerosas veces que había visto a la hija de 'la más grande' llorar. Estas situaciones se daban frecuentemente y de forma continuada.
En su docuserie, Rociíto nos dejaba a todos impactados con el relato del infierno que vivió junto a su exmarido. Y ya no solo por los malos tratos, sino también por lo sucedido con sus hijos.
Carrasco acusaba a Antonio David de ejercer violencia vicaria, habiendo conseguido que tanto Rocío como David Flores se distanciasen de ella.
Todo ello gracias a la manipulación que ha ejercido desde que eran unos niños. Primero, con su hija mayor, que llegaba incluso a pegarle una paliza en 2012.
A partir de ese momento, madre e hija se distanciaban, y a día de hoy siguen sin tener relación. De hecho, Rocío ya ha cerrado cualquier puerta a una posible reconciliación.
Mientras que, por su parte, Carrasco insiste en que no se siente preparada para hablar con ella o retomar el contacto.
La mujer de Fidel Albiac se escuda en la depresión y ansiedad que lleva sufriendo desde hace años y que ha conseguido superar con mucha ayuda profesional.
Justo por eso, Rociíto considera que reunirse con la joven implicaría echar por tierra todo ese esfuerzo. Algo a lo que no está dispuesta.
De momento, tendrá que limitarse a ver a sus hijos en los juzgados, y es que David decidía denunciarla por el impago de la pensión alimenticia y abandono familiar.
Un juicio que está a punto de llegar, concretamente a principios del año que viene y cuyo resolución tiene a todos impacientes.