Rocío Carrasco tenía un claro objetivo cuando se propuso hacer su docuserie. Mucha gente se pensaba que lo realizaba para ayudar a las mujeres. Sin embargo, ella ha admitido en una entrevista que actuó desde el egoísmo y solo pensó en su interés personal.
Unas declaraciones que vendrían a corroborar las palabras de los Mohedano. Siempre la han acusado de moverse por dinero y eso incluso le habría llevado a distanciarse de ellos. La relación con su familia materna es totalmente inexistente.
Rocío pretende cerrar ahora un ciclo. Después de finalizar la emisión de su documental quiere pasar página y centrarse en otros proyectos, posiblemente lejos de la televisión. Han sido unos cuantos meses de mucho desgaste, en donde ha tenido que soportar todo tipo de comentarios.
Admitía en el espacio de radio Carne cruda que nunca "fue consciente de que iba a producir todo lo que produjo". Desde el primer momento se vio envuelta en una constante polémica. Se puede decir que la convirtieron en un referente dentro del movimiento feminista, algo de lo que parecía muy orgullosa.
En la primera temporada de su docuserie abordó los presuntos malos tratos de Antonio David. Aquello provocó que fueran muchos los que se posicionaran a su lado. En la segunda parte se centró más en cuestiones de su madre y su familia.
Quiso dejar claro que su objetivo con todo ello no era social. Se muestra muy sincera a la hora de tratar este tema tan delicado.
"Quedaría muy bien decir que yo lo hice por las mujeres, pero eso no es verdad", indica la hija de 'la más grande'. Confiesa que "lo hice desde un punto de vista meramente egoísta porque lo necesitaba".
Rocío Carrasco pensó únicamente en ella. Se desconoce si recurrió a la televisión como terapia, para liberarse de todas las cargas que había acumulado o para ganar dinero. Eso es una cuestión que debe aclarar.
No obstante, entiende que esta experiencia le ha servido de mucho. Sobre todo para comprobar que su situación "no es tan diferente a la de muchísimas mujeres". Además, admite sentirse muy orgullosa con todo lo conseguido con su testimonio.
"Sería mentira si no dijera que me ha aportado satisfacción por lo que haya podido aportar a la sociedad", explica. Continuó asegurando que "una de las partes que necesitan las víctimas es que se sepa la verdad, que se les vea y se les escuche".
Fue algo que le dijeron los responsables de la producción antes de la grabación y que aún recuerda. Todo esto le ha ayudado mucho para su salud mental y para librarse de los males que venía arrastrando. El pasado suponía todo un lastre para ella.
Rocío Carrasco desvela los motivos
Rocío Carrasco tenía muchas cosas que decir, pero optó por ir a la televisión para desvelar todas sus experiencias. En concreto a Telecinco. Escogió este canal "porque era el único sitio en el que lo podía hacer".
Aseguró que "era la cadena principal que contribuyó a que eso sucediera". Durante este periodo ha conseguido hacer grandes amigos en Fuencarral. A la familia Campos se le unieron David Valldeperas, Carlota Corredera o Jorge Javier Vázquez.
Con todos ellos mantiene una estrecha relación. De hecho, se les suele ver juntos en algunas fiestas o incluso acude a la casa del presentador cuando quiere interesarse por su estado.
Rocío Carrasco siente que esta docuserie le ha cambiado la vida y para bien. Después de sus intervenciones, ahora ha llegado el momento de escuchar a la otra parte, a los Mohedano y a Ortega Cano.