Rocío Flores sorprendía a todo el mundo este sábado abordando un tema tan personal como su posible boda. Por primera vez, la hija de Antonio David hablaba abiertamente sobre un posible enlace con su novio Manuel Bedmar. Se encargó de ponerle fecha y de aclarar quiénes serían sus invitados.
Después de seis meses apartada de la televisión, la influencer reaparecía en un programa. Intervino en directo en Fiesta con Emma García justo antes de debutar como presentadora de un evento en Barcelona. No huyó de ninguna cuestión, al tiempo que trataba de contener los nervios típicos de un estreno.
Rocío debutaba en una plaza muy complicada. La encargada de realizarle las preguntas era la pareja de su padre, Marta Riesco, que se mostró muy cercana con ella. Durante un tiempo habían roto las relaciones, pero parece ser que han conseguido curar algunas de las heridas formadas.
Había interés por conocer cómo estaba llevando los nuevos idilios de su padre y Olga Moreno. Tiene claro que "si mi padre es feliz contigo (en alusión a Marta) y Olga es feliz con Agustín, perfecto". Se la veía especialmente nerviosa, ya que en cuestión de minutos iba a ejercer como maestra de ceremonias.
Explicaba que estaba "supernerviosa, no le he pedido consejo a nadie, me he dejado llevar hasta estas últimas horas. Espero estar a la altura", añadía la joven.
Después de medio año apartada de los platos había interés por conocer a qué se dedicaba ahora. "He estado de vacaciones, en redes sociales, tengo un proyecto para 2023 y sigo estudiando", contó. En lo que se refiere al plan que tiene para el próximo año prefirió guardarlo en secreto.
Rocío Flores indicó que "no puedo comentar nada del proyecto porque para que las cosas salgan bien, no hay que decir nada". Eso sí, aclaró que se trataba de algo totalmente ajeno a la televisión.
Respecto a un posible regreso a los programas, trató de esquivar la pregunta. Lo que más le preocupa en estos instantes es "pensar en mí, quiero ir despacio". Pese a que ya no tiene los ingresos de este medio, no le faltan las oportunidades laborales a través de otros canales como las redes.
Algo que desea todo el mundo es que la influencer llegue a hacer las paces con su madre algún día. Sin embargo, parece algo muy lejano ante el escaso interés que muestras ambas partes. Cuando se le cuestiona sobre un posible acercamiento, ella lo tiene claro.
"Lo que necesito es estar tranquila. Estoy bastante al margen de lo que dice mi madre, pero lo llevo mal, como cualquier hija lo llevaría", apuntó. Pese a que ahora todas las críticas de Rociíto se concentran en la familia materna, tampoco parece que le esté gustando demasiado su comportamiento.
Rocío Flores se siente preparada para casarse
Rocío Flores no esquivó las preguntas que se le plantearon desde el plató de Telecinco. Emma García quiso saber si estaba preparada para un posible enlace matrimonial de su padre. "Estoy preparada para mi boda, si es que llega", admitió entre risas.
Lo que no se sabe es si entre los invitados estaría Olga Moreno, con la que mantiene una relación un tanto extraña. Después de mucho tiempo a su lado, parece que se han ido distanciando a consecuencia de lo ocurrido recientemente. Confirmó que "es una persona muy importante en mi vida, las relaciones pasan por altibajos".
Continuó diciendo que como "ya se encargó ella de decir, no estamos en el mejor momento". Respecto a la posibilidad de retomar la relación, señalo que "Olga es la madre de mi hermana, mi familia es lo primero".
Rocío Flores ya advirtió que su mayor preocupación en estos instantes es ella misma. Quiere dejar de lado a su entorno y centrarse en sus asuntos.