El entorno de Felipe VI ha aclarado la situación de la reina Sofía respecto a sus rodillas, asegurando que no hay motivo de preocupación. Recientemente, unas imágenes de ella necesitando ayuda para bajar unas escaleras generaron inquietud. Sin embargo, a sus 86 años, Sofía disfruta de una salud admirable, y sus leves dificultades son esporádicas.
La madre de Felipe no padece ninguna enfermedad que se asemeje a la de su esposo, Juan Carlos I. A diferencia de él, la reina Sofía no requiere bastón ni silla de ruedas para desplazarse, lo que refleja su buen estado físico. No obstante, es natural que necesite asistencia en ciertos momentos para mantener el equilibrio.
¿La reina Sofía tiene problemas de salud?

La preocupación surgió cuando, durante una visita a Segovia, Sofía necesitó ayuda para bajar unas escaleras. Dos personas la sostuvieron firmemente para evitar una caída. Esta imagen generó dudas sobre el estado de sus articulaciones, especialmente sus rodillas. Sin embargo, el entorno de Felipe ha aclarado que no hay problemas significativos en las rodillas de la reina Sofía. Destacan que, a su edad, es normal que busque apoyo en ciertas situaciones.
Lo ocurrido en Segovia fue simplemente una medida para asegurar su estabilidad y evitar caídas. Los escalones eran más altos de lo habitual, por lo que optó por recibir ayuda. Así, se descarta que la reina Sofía esté experimentando un deterioro físico preocupante.
Comparación con Juan Carlos I

En contraste, Juan Carlos I sí necesita un bastón o incluso una silla de ruedas para moverse. En los últimos tiempos, ha enfrentado serios problemas de movilidad que han requerido ajustes en su vida diaria. Esta no es la situación de la reina Sofía, quien se maneja de manera independiente, salvo en momentos donde su estabilidad podría verse comprometida.
La excelente salud de la reina Sofía
Uno de los aspectos destacados de la madre de Felipe VI es su compromiso con un estilo de vida saludable. Su dieta es mayormente vegetariana, evitando alimentos procesados y azucarados. Este enfoque, junto con su actividad constante, ha contribuido a su excelente estado a los 86 años.
En este tiempo, no ha tenido ingresos hospitalarios significativos. El último fue hace unos meses debido a una afección respiratoria de la que se recuperó rápidamente. Esta fue la primera vez que visitó un hospital desde el nacimiento de Felipe.
El buen estado de salud de la reina Sofía se debe a su estilo de vida saludable. Sin embargo, el paso del tiempo es inevitable y conlleva la pérdida de ciertas capacidades. Esto explica por qué necesitó ayuda para bajar las escaleras.
En realidad, no sufre de dolencias en sus rodillas, como demostró al continuar su camino sin problemas tras descender los escalones. Por lo tanto, se descarta que la madre de Felipe esté enfrentando problemas de salud. En cuanto a su salud mental, se menciona que atraviesa un momento complicado debido al estado de Irene de Grecia.