La semana blanca sigue en First Dates un día más. Jorge asegura que le gusta hacer lo que le da la gana y se define como alguien muy sociable.
Le encanta ponerse lo que le da la gana y al que no le guste que se aguante. "Para mi la ropa no tiene género", asegura. Y es que le encanta maquillarse y ponerse tops.
No ha tenido nunca una pareja seria. "Soy como un banco del parque, muchos se sientan pero ninguno se queda".
Ángel busca a alguien que le saque de su zona de confort. Le encanta pasar tiempo de calidad consigo mismo.
Se lamenta por ya no tener la misma inspiración que antes. Él no sabe muy bien que hacer de cara al futuro, aunque le gusta la moda.
Ambos coinciden en la forma de vestir y es que arriesgan mucho. Jorge también le confiesa que en su pueblo no le aceptaban y por eso tuvo que irse lejos.
Además, los dos comparten ropa y complementos con sus madres. Otro detalle que tienen en común.
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A nivel de amor, Ángel confiesa que nunca ha tenido pareja estable. Al igual que Jorge, que considera que en un pueblo ha estado mucho más limitado a la hora de conocer gente.
Los dos tienen claro que deberían socializar y salir más. E incluso acuerdan compartir la ropa y deciden irse juntos aunque sea para darle una oportunidad a su amistad o lo que surja.
María e Inocencio deciden pasar juntos el resto de su vida
María llega muy nerviosa y sin saber cómo reaccionar cuando ve a Carlos Sobera. Tiene la suerte de que a su edad, los 86 años, no ha visitado nunca un médico.
Hace 18 años que no tiene pareja, le encanta viajar por Europa y conducir.
Busca a alguien que la acompañe y que sienta curiosidad por la vida. También que tenga cultura y sea animado. "Yo me enamoro rápido", confiesa. "Menudo corazón tan grande tengo".
Inocencio es un enamorado de la vida, de las mujeres bonitas y las buenas cenas.
Nada más conocerse la chispa salta entre ambos. "¡Pero qué guapa!", exclama al verla. "No me merezco tanto".
Y a ella le ha encantado su sombrero. A Maria también le ha parecido un caballero y una persona encantadora.
Inocencio y María tienen claro que lo más importante en una relación es la comprensión, el cariño y pasas tiempo juntos.
Para ellos, y a su edad, "el sexo es una caricia, compartir, cuidarse, una buena cena, ir a bailar, no enfadarse…"
Finalmente los dos están de acuerdo en que pueden ser felices lo que les quede de vida.
Antón y Águeda no sienten la chispa necesaria
Antón es muy tímido, le cuesta ligar porque se pasa mucho tiempo trabajando de fotógrafo y no encuentra el momento.
Considera que conectar en ciertos aspectos es suficiente para poder entablar una relación.
Águeda se define como mimosa, muy fiel y sincera. Unas cualidades que considera muy importantes.
Ambos se han gustado físicamente nada más verse. Ella confiesa ser muy torpe, aunque él también le cuenta alguna anécdota en la que se ha caído de manera estrepitosa esquiando.
Ella estuvo con un chico durante siete años y le dejó por tema de inseguridades.
Mientras que Antón solo ha tenido una relación de un año con una chica y que se rompió porque eran más amigos que pareja y ahora se llevan fenomenal.
A Águeda le encantan los planes que hace Antón, le parecen muy divertidos, como ir a escalar.
De hecho, le ha pedido que la invite a alguna de las fiestas que organiza. Después, los dos se han atrevido a bañarse en el jacuzzi y quitarse la ropa.
Antón incluso la reta a pasearse por el restaurante en bañador y ella acepta.
Sin embargo, la pasión no ha terminado de saltar entre ambos y han acordado quedarse como amigos.