Fue la musa de Telecinco desde marzo de 2021, desde que su relato lleno de verdades y mentiras conquistó y a la vez llenó de impotencia a los espectadores. Entonces ella gozaba de la impunidad de haber conseguido 'vetar' al hombre que culpaba (y sigue culpando) de todos sus males, a Antonio David, quien fue despedido de forma fulminante (e improcedente) mientras un 016 aparecía en pantalla, dejando entrever que "un grupo como Mediaset no podía permitir tener a un maltratador en plantilla".
Sí, así lo veían ellos, o así lo querían transmitir a través de continuas manipulaciones y una clara estrategia mediática que fue totalmente errónea.
Rocío Carrasco provocó el efecto contrario al deseado
El pensamiento único, el comportamiento autoritario y el tachar a una familia de ser, cuanto menos, diabólica, provocó el efecto contrario al deseado. La gente no es boba, al menos la mayoría, y se dieron cuenta del cuento según se iban desarrollando los acontecimientos de una forma tan previsible, tanto es así que el 'huracán Carrasco' fue en declive, y no lo digo yo, lo dicen los datos de audiencias y el hartazgo de la gente, y no hablo de las redes sociales, sino de la gente de la calle.
Para algunos, por mucho que se nos repita una y otra vez que algo es cierto, no se convierte en verdad, por mucho que lo intenten. De hecho yo detesto que me tomen por imbécil, y más cuando eres conocedora de cómo se gestionan las cosas, la intencionalidad y ciertos aspectos que muchos de los que están en el sofá de su casa no ven o no son conscientes (esto no es apto para fanáticos).
Bueno, ahora lo importante es que esa musa, y también su marido, Fidel Albiac, quien casi siempre se ha mantenido en un segundo plano, pero que a la vez se encarga de gestionar y organizar cada proyecto en el que se embarca su mujer (y esto es así) han sido vetados de Mediaset junto a otras once caras conocidas.
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Pretenden "blanquear y dignificar los contenidos"
Muchos se preguntan el por qué de esta decisión por parte de la nueva directiva, y también qué pinta Fidel si él no es personaje público.
Lo cierto es que desde las altas esferas pretenden "blanquear y dignificar los contenidos", apartando todo lo que consideren "problemático, polémico y conflictivo". Para bien o para mal, el caso de Rocío Carrasco lo ha sido y lo continúa siendo dada la controversia y lo delicado de la temática que ha tratado, con rostros políticos de por medio que, además, se han pasado a la justicia por donde han querido.
Todo muy normal, sí. En el caso del abogado, pues claramente su figura va unida a la de ella, y aunque este siempre ha suscitado un interés, e incluso misterio para el gran público, no ha salido a la luz nada que él no ha querido que saliese. Y ahí lo dejo.
Ante esta realidad, que algunos fanáticos e ignorantes se negaban a creer, hemos visto a la hija de Rocío Jurado promocional el musical dedicado a su madre ante los micrófonos de los medios de comunicación, en plena calle, en radios, e incluso recientemente ha acudido a un programa de TVE de Cataluña presentado por su amigo Marc Giró.
Esto no ha sido cosa de un día, y es que hay cositas detrás. Algunas ya están saliendo, y otras, las veremos. Al final todos tienen derecho a buscarse la vida, pero el resto también tenemos derecho a sentirnos, una vez más, engañados.