Supervivientes enfila ya la recta final y entre los concursantes comienzan a notarse los nervios y las ganas de ser finalistas. El pasado jueves tuvo lugar una nueva gala donde se conoció la expulsión de Alma Bollo y se vivieron momentos muy delicados.
Uno de ellos tuvo lugar en Honduras, desde donde Laura Madrueño daba paso a una de las pruebas más duras de Supervivientes. El afán de los supervivientes para llevarse el premio es tan grande que esto ocasionó un gran susto en pleno directo.
Supervivientes enmudece ante lo vivido en la prueba de líder
Supervivientes ha sometido a los concursantes durante tres meses a las situaciones más críticas. El hambre, los mosquitos, las inclemencias del tiempo, todo ello ha contribuido a mermar las fuerzas y algunos han llegado al límite.
No obstante, la final está cada vez más cerca y resulta imprescindible darlo todo en las pruebas para asegurarse un puesto. El jueves llegó la temida Noria Infernal en la que dos concursantes se ganaron el puesto para poder participar.
Asraf y Artùr fueron los afortunados tras ganar unas pruebas previas donde vencieron a Adara, Alma y Jonan. Más tarde, ambos se midieron las fuerzas con Bosco en otra eliminatoria que le dejó fuera de disputar la prueba de líder.
La noria esperaba a los dos vencedores, cuyas fuerzas habían quedado bastante mermadas tras las otras pruebas. Lo que desconocían era que un problema de salud de uno de los supervivientes terminaría con su sueño de ser líder.
Dispuestos ya en la estructura, Asraf y Artùr comenzaron a girar aguantando lo máximo posible. Sin embargo, el ucraniano encogió el corazón de todos al salir despedido hacia el agua al fallarle las piernas.
"¿Estás bien?", le gritó Laura, angustiada por lo ocurrido y temiendo que el modelo se hubiera hecho daño. Este le respondió que se encontraba bien y que sintió un mareo y un dolor que le dificultó el poder agarrarse a la noria.
Como consecuencia, Asraf se volvió a proclamar ganador de la prueba de líder, evitando así poder ser nominado por sus compañeros. Quince fueron los minutos que aguantó girando y siendo consciente de que sus fuerzas estaban al límite.
Supervivientes se endurece de cara a la final
Supervivientes ha experimentado un cambio de tendencia que no ha pasado desapercibido para nadie. Son solo cinco los concursantes que quedan en Honduras y las pruebas están siendo decisivas a la hora de ganarse un puesto como finalista.
A estas alturas del concurso no está siendo fácil mantener la energía ni las fuerzas y muchos comienzan a acusar el desgaste. La prueba de la Noria Infernal vino precedida de dos más que dejaron a los supervivientes muy tocados.
Teniendo en cuenta que es una de las pruebas más complicadas, el hecho de que se enfrentaran a ella exhaustos ha terminado pasándoles factura. Artùr fue el primero en sentir que se desvanecía y de ahí que terminara cayendo al agua. Lo cual podría haber sido muy peligroso si hubiera perdido el conocimiento.
Tras ganar, Asraf confirmó lo duro que le había resultado no sufrir el mismo final que su compañero. "Se nota la diferencia de esta vez y la otra, estando cansado, me ha costado muchísimo", relataba. "Pero estando mal, sin dormir o lo que sea, seguiré luchando hasta el final", sentenció.
Es evidente que todos quieren llegar a la final y que deben hacer un último esfuerzo para aguantar. Sin embargo, aún quedan días por delante y más pruebas que pondrán en jaque las pocas fuerzas que todavía les quedan. Por lo pronto, el novio de Isa continua una semana más gozando de la inmunidad y reafirmándose como el favorito para ganar los 200.000 euros.