Telecinco está viviendo meses convulsos, por su bajada de audiencias y porque la nueva directiva no está dejando 'títere con cabeza'. Ha introducido el veto a una larga lista de personajes famosos de nuestro país y ha decidido acabar con programas emblemáticos de la cadena. Nos estamos refiriendo, por ejemplo, a Sálvame y al Deluxe.
Pero, por si fuera poco, en las últimas horas Telecinco ha dado un paso más. En concreto, ha procedido a actualizar su código ético. Y esto va a afectar al futuro de Supervivientes, sí, porque tiene que ver con todos los realities.
Telecinco anuncia una nueva norma
La principal cadena de Mediaset vuelve a ser noticia por cambios que está introduciendo. Cambios que, al parecer, pretenden seguir contribuyendo a mejorar la imagen del grupo y, sobre todo, a hacerlo más ‘familiar’.
Telecinco ha anunciado mediante nota de prensa que se “ha actualizado su Código Ético para incluir un Protocolo de Actuación aplicable a programas de telerrealidad. Programas que conllevan aislamiento y convivencia grupal durante prolongados periodos de tiempo y que, en algunos casos, se desarrollan en entornos complejos”.
Es un documento que “contiene principios de obligado cumplimiento encaminados a regular la convivencia de los participantes y preservar y garantizar su salud y bienestar”.
De esta manera, se viene a intentar exponer que el grupo de comunicación va a velar más que nunca por los concursantes de realities. Así, se quiere evitar que se produzcan situaciones bochornosas como, por ejemplo, el comportamiento que Yaiza ha tenido con Asraf en Supervivientes. Y también se pretende protegerlos al máximo para que no vuelva a suceder algo como lo que le pasó a Carlota Prado en Gran Hermano.
Telecinco desvela los principales cambios del código
Mediaset ha revelado que estas modificaciones se vienen a concretar en diez normas básicas que, a su vez, se dividen en tres secciones.
En primer lugar, está el área referente al proceso de selección de participantes. Por ejemplo, se indica que hay que tener muy claro qué tipo de perfiles se busca y que la productora debe comunicar al grupo la lista de participantes. De ahí que sea la directiva del aquel la que deba aprobarla o rechazarla.
Es más, incluso se establece que cualquier participante de un reality deberá pasar un examen médico, físico y psicológico. Sin pasar por alto que se investigará su entorno y se rechazará cualquier aspirante “con antecedentes acreditados de violencia de cualquier índole en los cinco años anteriores al proceso de selección”.
En el segundo apartado se habla de entornos seguros, así como de la asistencia psicológica. Exactamente, se expone que la productora del programa en cuestión será quien se comprometerá a tomar las medidas necesarias en pro del bienestar y seguridad de los concursantes. Y esto pasa por ponerles a su disposición tanto psicólogos como médicos, por ejemplo.
Por último, en la tercera sección se ponen sobre la mesa cuestiones realmente importantes. Nos estamos refiriendo a temas como el control preventivo, la intervención reactiva y los comportamientos y actitudes prohibidos.
Esta es quizás la parte más importante de este nuevo código de Telecinco, pues establece todo lo que no se va a permitir en un programa de telerrealidad. Se recoge que “la productora proscribirá, impedirá o atajará con todos los medios a su alcance cualquier comportamiento o manifestación susceptible de ser considerado acoso o abuso sexual, bullying”.
También cualquiera que se entienda que es “discriminatorio por razón de género, raza, nacionalidad, creencia, religión”. Y, por supuesto, también se prohíben “consumo de drogas, violencia física o verbal, consumo inmoderado de alcohol, utilización de imágenes de los concursantes bajo el influjo de ese”.
De igual modo, se establece que la productora está obligada a contar con todo el equipo necesario para atender adecuadamente a los participantes y a informar a Mediaset de cualquier incidencia.