No cabe duda de que Rafa Nadal goza de una impresionante fortuna gracias a sus títulos y su brillante carrera como tenista.
Y ahora que se ha convertido en padre por primera vez junto a su mujer, Xisca Perelló, no puede ser más feliz.
El pequeño Rafael llegaba al mundo antes de lo esperado, en la semana 37 de gestación y habiendo tenido que contar Xisca con muchos cuidados.
De hecho, Perelló pasaba mucho tiempo en el hospital por precaución antes de dar a luz, lo que también tenía muy angustiado al tenista, que debía seguir con su estricta rutina.
Así lo confesaba el mismo: "Son situaciones a veces más difíciles de gestionar cuando uno está lejos de casa".
"Como sabéis, a nivel personal estoy en una situación que es importante para mí. Y tengo que ir gestionando todo. Por mucho que salieran según que tipo de informaciones en la prensa acerca del estado de mi mujer, mi mujer está bien, ya lo dejo caer".
Por suerte, la historia ha tenido un final muy feliz para todos, y ahora la pareja mira al futuro con gran ilusión.
Tras años viviendo por y para el deporte que le apasiona, Nadal reconoce que es el momento de darse un respiro.
"Ahora es momento de tener mi primer hijo y confiar en que todo salga bien. La vida personal siempre va por delante de la vida profesional", señalaba.
Rafa acumula nada menos que unos 92 títulos en total, y se estipula que solo gracias al Roland Garros puede embolsarse cerca de 20 millones de euros.
Rafael Nadal y Xisca Perelló deciden darse un capricho tras la llegada de su hijo
Por tanto, nos hacemos una idea de la impresionante cifra a la que puede ascender su patrimonio. Así, no sorprende que el tenista decida darse unos merecidos caprichos, como varios coches de alta gama o un catamarán valorado en nada menos que 5 millones.
Sin embargo, ante la llegada de su pequeño, nadie duda de que las prioridades cambian y la pareja ya piensa en ofrecerle lo mejor.
Tanto es así, que han decidido autoregalarse un impresionante coche: un Ferrari 458 que les permite disfrutar a alta velocidad.
Por otro lado, todo indica que criarán al niño en su casa de Porto Cristo (Mallorca), de la que ya nos han mostrado algún rincón.
Sobre todo la cocina, donde a Rafa le gusta poner a prueba su talento de vez en cuando, tal y como muestra en redes sociales.
Además, no cabe duda de que el matrimonio dispone también de numerosos espacios en los que puede entrenar y aprovechar para ponerse en forma.
De hecho, muchos apuestan también por su hijo, que puede seguir la exitosa carrera de su famoso papá cuando crezca y quién sabe si podría dedicarse también al tenis.
Nadal anunciaba hace poco que ya no lucha para ser número 1, sino "para ser competitivo en todos los eventos que disputa". "Hace tiempo que luchaba para serlo y ya lo logré", alegaba al respecto.
Y es que su hijo ya se ha convertido en su principal prioridad. "Es curioso que ya le eche de menos conociéndole desde hace apenas tres semanas", señalaba muy emocionado durante una reciente aparición en público.
"Como todos los cambios en la vida, es algo complicado, pero afortunadamente vivimos rodeados de tecnología y podemos hacer videollamadas en cualquier momento". Un nuevo reto para el tenista y su mujer, criar a su hijo, el pequeño Rafael.