Anabel Pantoja se enfrenta a sus navidades más complicadas. Será el primer año que la sevillana celebre la Navidad sin su padre, fallecido hace más de dos semanas. Además, un nuevo frente amenaza a la familia después de conocer que Irene Rosales se ha negado a ir a Cantora a visitar a su suegra.
Las polémicas familiares siguen estando muy presentes y la mujer de Kiko no olvida lo mal que se lo ha hecho pasar la tonadillera. Anabel ha decidido no mediar en el conflicto y dejar que madre e hijo lleguen a un entendimiento. No obstante, este desplante deja a la influencer sin poder disfrutar de la Nochebuena junto a sus sobrinas, a las que adora.
Anabel Pantoja recibe un 'no' por respuesta
Anabel Pantoja comienza a hacerse una idea de lo complicadas que serán estas fiestas. A pocas horas de la Nochebuena, Cantora se prepara para unas celebraciones muy diferentes a las de otros años.
Hace unas horas, Anabel recibía con ilusión la noticia de que Kiko había levantado el teléfono para hablar con su madre. Tras años sin dirigirse la palabra, el DJ ha decidido dar el primer paso y acercar posturas con Isabel. Un gesto que hace pensar en un acercamiento y en un esperado reencuentro.
"La echa de menos y quiere verla", comentaba Pepe del Real en el plató de Ana Rosa. Una buena noticia que llena de esperanza a Anabel Pantoja deseando que, por fin, dos de las personas más importantes para ella limen asperezas.
No obstante, no todos los miembros de la familia de Kiko irán hasta Cantora para felicitar la Navidad a la cantante. Irene no parece estar muy conforme con las intenciones de su marido y decidía plantarse y no viajar hasta la finca.
"No piensa pisar Cantora hasta que no arregle las diferencias con su suegra", explicaban en el programa matinal de Telecinco. La mujer de Kiko sigue sin perdonar a Isabel por todo lo que ha hecho a su familia y estas navidades tampoco se producirá la reconciliación entre ellas.
La hija de Bernardo Pantoja sabe que Rosales sigue muy dolida, pero celebra que su primo haya dado el paso. Anabel sabe que su tía no atraviesa un buen momento y recibir la llamada de su hijo le ha llenado de alegría.
Anabel Pantoja se prepara para sus navidades más difíciles
Lo cierto es que Anabel Pantoja tiene otras cosas en mente que preocuparse porque Irene no acompañe a Kiko a Cantora. La influencer sigue de duelo por la muerte de su padre y afectada por el revuelo que causó su entierro. Junko sigue presionando para hacer ver que la relación con la hija de su marido está rota y celebró una misa en su honor sin la presencia de Anabel.
Por su parte, Anabel decidió poner tierra de por medio y no volver a inmiscuirse en los problemas de su tía. Hace meses salió muy mal parada por no posicionarse a favor de su primo cuando se emitió La herencia envenenada y esta vez no quiere saber nada.
Lo que sí echará de menos Anabel Pantoja es no poder disfrutar de sus sobrinas estas navidades. Todavía no se sabe si Irene permitirá que las niñas acompañen a su padre a Cantora, ya que sigue sin perdonar que no las haya llamado en este tiempo.
Isabel rompió por completo todo contacto con la familia de su hijo y no levantó el teléfono para saber de sus nietas. Un hecho que dolió mucho a Rosales, incapaz de entender cómo una abuela era capaz de hacer eso.
Sin duda serán unas navidades especialmente complicadas para Anabel en medio de numerosas polémicas que amenazan con empañar estas fiestas.
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