Roberto Leal lleva presentando Pasapalabra desde 2020 cuando el programa regresó a Antena 3 después de pasar unos años en Telecinco. El año pasado el concurso registró sus mejores marcas y se convirtió en minuto de oro día tras día en las audiencias.
Ahora Roberto Leal ha hablado con la revista Semana y ha confesado cómo se siente al presentar dicho programa que ha alcanzado tantísimo volumen de audiencias.
Roberto Leal asegura que "no se puede ir de sobrado"
Y como si quisiera enviar un recado a alguien de la competencia, el presentador dice claro que "yo miro las audiencias cada mañana. Porque me debo a ello por mi oficio, porque tengo el gusanillo y porque no se puede ir de sobrado".
Además explica que gracias a sus buenos registros de audiencias "se vive muchísimo mejor y mucho más tranquilo. Por supuesto. Esto no es falsa modestia".
Y aunque la vida le ha cambiado mucho, Roberto Leal asegura que intenta seguir siendo una persona accesible. "Considero que mi vida ha cambiado mucho, pero intento atender a todo el mundo. Sería deshonesto si te dijera que contesto a cada persona, porque sería imposible".
No obstante, "trato de cuidar a la gente que me pide cosas, sobre todo a los estudiantes de periodismo, porque yo en su día también lo hice".
Pese a todo y pese a sus buenas marcas, Roberto Leal tiene claro que la fama no le ha cambiado: "A mí no me ha cambiado. Habrá gente que pueda pensar que sí, pero esa gente no me conoce. Yo sigo siendo el mismo".
Roberto Leal trata de ser la misma persona dentro que fuera de la televisión
Según él "sigo trabajando igual. Sigo tomándome todo igual de en serio y no voy por la calle pensando que este programa va así de bien por mí ni nada por el estilo. Eso sería súper aburrido, ¿no? Tengo otros problemas en los que pensar", reconoce.
Entre esos problemas que ocupan su tiempo, Roberto los ha explicado. "Yo tengo mi productora y con eso ya tengo mucho jaleo".
Además, confiesa que no tiene tiempo para nada. "También trato de sacar tiempo para mi mujer y mis hijos. Y, bueno, hago muchos deberes, que yo no sabía que con cinco años había que hacer tantas tareas extraescolares".
La falta de tiempo es algo que le puede preocupar al Roberto Leal del futuro. "No he ido porque no me voy de cañas con nadie, porque no me da la vida, pero no me importaría". Reconoce refiriéndose a si se iría de cañas con alguno de los participantes del concurso.
"Con muchos de ellos me intercambio el teléfono y mantengo el contacto. No me llamo con ellos todos los días, pero sí de vez en cuando. Es que al final pasas mucho tiempo con ellos, Rafa y Orestes son ya como colegas de toda la vida", ha explicado el presentador.
Roberto Leal también ha querido hablar de su madre y ha mandado un mensaje claro: "A las madres hay que llamarlas". Además, ha reconocido que su madre "os diría que soy muy cabezota, que me encanta llevar la razón siempre y que me enfado por tonterías".
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