Llevábamos un tiempo sin saber nada de Rocío Carrasco y Fidel Albiac. Desde que Mediaset dio la orden de vetarles (junto a otros once rostros conocidos) de los contenidos de la cadena, son muy pocos los datos que hemos conocido sobre su vida, más allá de las apariciones puntuales en televisión de la hija de Rocío Jurado y de su gira con el musical que lleva por todo lo alto el nombre de la artista fallecida.
Hace tan solo unos días, el matrimonio reaparecía públicamente en Sevilla (tierra natal de Fidel) en la boda de Raúl Prieto y Joaquín Torres. Y aunque no les hemos visto en televisión (por razones obvias), sí han hablado para medios digitales o incluso en canales de YouTube.
Fidel Albiac y Rocío Carrasco han conseguido su objetivo
Parece que poco o nada queda de las tormentas pasadas y de ese huracán mediático que Fidel preparó en forma de documental desde 2019, cuya emisión comenzó en marzo de 2021.
Él, siempre en la sombra, orquestando los planes a seguir y manteniendo conversaciones con directivos con una intención clara, que no era otra que acabar con el enemigo a través de su mujer, siendo esta quien siempre dio la cara con el único fin de destrozar la imagen de Antonio David. Un objetivo que el matrimonio consiguió con la ayuda de la productora La Fábrica de la Tele.
Ahora, más de dos años después, todo ha cambiado. Rocío Carrasco ya dio por concluida su etapa en la cadena con dos docuseries a sus espaldas, varios especiales y demás apariciones en diversos formatos. Han conseguido, en primer lugar, contar un con séquito de seguidores fieles que, a día de hoy, les siguen defendiendo por encima de todo.
Han logrado acumular un buen colchón económico con el que pueden vivir tranquilos durante un largo periodo de tiempo, aunque para ello hayan tenido que rodar cadáveres.
El huracán Carrasco… ¿el principio del fin?
Y lo mejor de todo, es que están siendo testigos desde sus casas de como esa productora, esa que tanto machacó la imagen de Carrasco, atraviesa hoy su peor momento tras el fin de Sálvame, tras los problemas legales a los que se enfrenta, y por muchas cosas más. En definitiva, que Telecinco va cuesta abajo y sin frenos y a ellos no es algo que les vaya a quitar el sueño, vaya.
Sea como fuere, y centrándonos en el caso de Fidel, le gusta relacionarse siempre con los que están arriba. Siempre se ha dicho, pero en el caso del pasado fin de semana, se ha visto claro.
Ya no solo por el protagonista de la boda, Raúl Prieto, exdirector de varios formatos de Telecinco, sino porque durante los dos días de esta celebración se ha rodeado de diferentes directores y productores ejecutivos de Mediaset, con los que siempre intenta estrechar lazos de cara a… lo que sea.
Hasta Amador Mohedano lo dijo hace poco (y él le conoce desde hace más de veinte años). Dijo que le gustaba el famoseo, la popularidad y relacionarse, pero siempre lo ha hecho desde la sombra, sin que muchos se enteren. Ahora ya ha ganado todo lo que tenía que ganar, y tan solo le queda presumir de ese “poder” del que tanto disfruta.