Kiko Hernández se quedaba de piedra, al igual que el resto de la audiencia, tras escuchar el testimonio que evidencia los supuestos malos tratos de Ortega Cano a Rocío Jurado.
Los rumores sobre la supuesta mala vida que el torero le daba a su mujer siempre le han rondado, pero hoy cobran más fuerza que nunca.
Y más después de que Rociíto haya sacado a relucir aquellos escritos en los que 'la más grande' relataba con todo lujo de detalles los desplantes de su marido.
Para empezar, Carrasco asegura que Ortega había echado en numerosas ocasiones a su madre de casa.
"No actuó bien con mi madre. Se daban situaciones imperdonables que no se tenían que dar", arremete contra él en la docuserie.
Así, la hija de 'la más grande' recuerda uno de aquellos episodios en los que recibía una llamada en plena noche.
"Yo estaba en Sevilla y me dijo ‘¿Podéis venir a recogerme?’. Cuando llegué me la encontré en las escaleras de la finca con dos maletas… Le dije: ‘¿esto que és?’ y me dijo: ‘Me ha dicho que me vaya’. ¡Eso lo he vivido yo!", sentencia furiosa.
Rociíto también se lamenta por no haber podido ayudarle en aquel momento, ya que ella estaba viviendo su propio infierno al lado de Antonio David.
Kiko Hernández tiene las pruebas que incriminan a Ortega Cano
En plató, tanto Rocío como el resto de colaboradores quisieron incidir en este tema. Sobre todo Kiko Hernández, que no se cortaba a la hora de preguntarle abiertamente sobre el contenido de esos escritos de su madre.
"¿En el documento manuscrito de tu madre que entregas en el juzgado dice: 'Son las 8 de la mañana y Ortega Cano ya me ha dado la primera hostia'?", le dice abiertamente.
Y lo cierto es que la respuesta de Carrasco no deja a nadie indiferente, sobre todo por las fuertes acusaciones que recaen sobre el diestro.
"Yo creo que eso es algo que se lo deben de preguntar a él cuando vaya a otra entrevista maravillosa, porque él tiene el mismo papelito que tengo yo y él sabe lo que pone en el papel perfectamente", deja caer la hija de 'la más grande' sin querer entrar en detalles.
"Es un tema donde no voy a entrar, hasta que no tenga que entrar y donde tenga que entrar. Él tiene el mismo papel que yo, porque yo lo entregué en sede judicial y a su abogado se le dio una copia. La próxima vez que vaya a una entrevista, que tengan lo que tienen que tener y se lo pregunten", advierte.
Tras estas palabras, tanto Hernández como el resto de colaboradores tienen claro que "se va a liar", y es que la guerra en el clan de los Ortega-Mohedano se recrudece por momentos.
El torero no da abasto ante tantos frentes abiertos, empezando por la ruptura con su mujer, su metedura de pata en pleno directo y ahora las acusaciones de malos tratos hacia la que fuese su mujer.
Eso, sin contar con que cierta amiga de su hija, Patricia Donoso, insinuaba que se había propasado con ella cuando Ana María Aldón estaba embarazada.
Un acoso y derribo constante ante el que el padre de Gloria Camila ya ha amenazado con tomar medidas legales.
Aunque, lo que más preocupa a su entorno, es que todo este revuelo termine pasándole factura a su delicado estado de salud.
Ortega Cano necesita llevar una vida tranquila y alejado de sobresaltos, aunque últimamente se ha topado con todo lo contrario.