Kiko Matamoros comienza a sentirse nervioso ante su inminente boda con Marta López Álamo. El colaborador se encuentra inmerso en los preparativos y Sálvame quiere conocer la última hora sobre el evento del año. Aunque todavía quedan muchos meses por delante, Kiko no quiere dejar nada para última hora y la lista de invitados comienza a tomar forma.
De sus compañeros de plató ya confesó quiénes tendrían un sitio en su boda, pero todavía faltan por perfilar algunos invitados. Uno muy especial acaparó el interés de todos la pasada tarde y Matamoros confesó lo que realmente desearía que pasase.
Kiko Matamoros asume que la relación no ha cambiado
Kiko Matamoros sabe que su boda con Marta acapara gran parte del interés mediático. Según el colaborador, espera que este enlace sea el último y que la modelo se convierta en su última mujer. La expectación es máxima, pues será el próximo dos de junio cuando ambos se den el ‘sí, quiero’ en la basílica de San Miguel.
Los asistentes ya han recibido las invitaciones, pero hay una que todavía está pendiente de confirmar. Se trata de la de Anita Matamoros, la hija que Kiko tuvo con Makoke y con la que lleva años sin dirigirse la palabra. La influencer acudió al estreno del pódcast de Laura Escanes y allí fue preguntada sobre la boda de su padre.
Anita siempre ha querido estar al margen de todo lo que tenga que ver sobre su vida privada y optaba por no pronunciarse sobre su padre. “Tengo la boda de Loreto, que me hace mucha ilusión. Esa es la boda que tengo”, se limitaba a contestar. Con estas palabras, la joven evitaba responder sobre su asistencia al enlace entre el colaborador y Marta, aunque parece evidente que no irá.
“No te comento nada de eso, no es nada nuevo, me mantengo al margen”, repetía ante la insistencia de la reportera. Al evento, también asistió la futura novia de su padre, quien tampoco quiso entrar en polémicas evitando responder si Anita está invitada.
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Por su parte, Marta confesó que todavía no han invitado formalmente a los asistentes, pero sí que han sido informados para que puedan organizarse. Matamoros escuchaba con atención las declaraciones de su hija y su futura mujer, y decidía confesarse ante sus compañeros de Sálvame.
Kiko Matamoros confirma los rumores
Tras el visionado de las imágenes, Kiko tomaba la palabra, pero siguiendo la misma línea que Anita y Marta. El colaborador se cuida mucho de mencionar a su hija en un plató, pues sabe que el deseo de la influencer es no entrar en el juego de sus padres.
“No voy a hablar ni de ella, ni de mi situación con ella, ni de mi relación por respeto a mi hija”, comenzaba diciendo. Matamoros se mostraba visiblemente molesto por la manera en que el programa había interpretado las palabras de su novia.
Según el vídeo, se dejaba caer que a la modelo no le importaba si Anita iba o no a la boda, cosa que molestó sobremanera al colaborador. “Entre las preocupaciones de mi pareja está mi bienestar, la relación con mis hijos y todo lo que concierne a mis hijos y a mí”, manifestó.
Retomando el tema de las invitaciones, Kiko ha explicado que llegan de fuera, concretamente de México y que algunas de ellas ya han sido enviadas. Sobre si Anita será o no una de las que reciba una de ellas, el tertuliano se ha negado a contestar.
Aunque finalmente ha manifestado que “me gustaría que en mi boda estuvieran todos mis hijos, y por eso voy a invitarlos a todos”. Con lo que daba a entender que Anita cuenta con un sitio en el día más importante para su padre. “Evidentemente, es mi hija y quiero que esté en mi boda, y punto”, concluía dando por zanjado el tema.